William Hazlitt, que publicó su vasta obra en las primeras décadas del siglo XIX, se inscribe en la frondosa e inagotable tradición del ensayo británico. Fue un autor prolífico y polémico, que nunca abandonó -tal como la mayoría de los escritores y amigos que lo rodeaban- los ideales revolucionarios venidos de Francia. El traductor y autor del prólogo, Rodrigo Olavarría, señala que El espíritu de la época , ensayo publicado en forma anónima en 1825, está considerado hoy como "el más sofisticado libro de ensayos jamás publicado en Inglaterra". Para ese entonces, ya se había enemistado radicalmente con el poder -o el poder con él- y ya no le publicaban una sola palabra, condenándolo a la pobreza. Un cáncer de estómago acabó con su vida en 1830. Tan pobre murió, solo en la miserable pieza que arrendaba, que la dueña de la pensión escondió su cadáver bajo la cama para mostrársela a otro interesado. El tiempo, sin embargo, se encargó de devolverle la fama y los lectores que merece; un siglo después de su muerte se publicaron sus obras completas en 21 volúmenes. En castellano hay poco: algunos breves ensayos publicados en México o en España y, ahora, esta edición chilena de dos muestras de su enorme talento.
En El placer de odiar , Hazlitt sostiene que es la única pasión que siempre permanece. La bondad se torna insípida, el dolor es agridulce porque requiere variedad, "el amor se transforma, con un poco de indulgencia, en indiferencia o repulsión; solo el odio es inmortal". Esa es la idea que preside todo el ensayo, que incorpora notas autobiográficas (Hazlitt reconoce que su mal genio puede haber influido en las peleas con sus amigos) y frases extraordinarias como esta: "Las viejas amistades son como carnes que se sirven muchas veces, frías, incómodas y desagradables". El segundo ensayo, La gente desagradable , es todavía mejor. Hazlitt explora desde las primeras líneas esta idea: "Esas personas que están incómodas dentro de sí mismas son incómodas para los demás". No se trata, pues, de defectos físicos o de la mente (como el orgullo o el mal humor), sino de una cuestión mucho más elusiva y difícil de aprehender, el modo en que aparentes virtudes se tornan en manifestaciones abiertamente desagradables: Hazlitt revisa muchos modos -todos muy familiares- y en el camino vuelve a construir un edificio de frases memorables.
William Hazlitt Ediciones Bastante, Santiago, 2018.
56 páginas.