¿Sabe Usía por qué la cocina inglesa tiene mala fama? Porque es la que primero experimentó en Europa los deletéreos efectos de la industrialización. Esta terminó produciendo más efectos malos que buenos en el planeta (ojalá los malos se hubieran confinado al Viejo Continente, donde nació; pero resulta que se extendió por doquier). Y alteró las relaciones sociales, y la calidad de casi todo lo que el hombre produce. Y, por cierto, también la comida. Hablemos más bien de "nutrición": sí, ésta puede que haya mejorado para muchos, aunque no sin causarles efectos adversos. El pan inglés de grandes panaderías, por ejemplo, es de las cosas más alimenticias para el soma y abominables para el paladar que uno se pueda imaginar. La calidad culinaria en general ha caído en picá.
Picá ha sido la carne de las únicas empanadas fritas de pino que nos han gustado en los últimos decenios y que comimos hace un par de días. Fueron hechas en casa de una amiga nuestra por una cocinera que no se rinde, que sabe que lo barato cuesta caro, y que "al que quiere celeste, que le cueste". Por ende, como dicen, ella exige, si se le pide hacer empanadas, que se le provea de posta negra de buena calidad, que procede a picar con cuchillo y harta paciencia hasta producir un resultado estupendo: un pino, hecho el día anterior, en que la cebolla ha quedado ya medio cocinada, y que es capaz de rendir todavía jugos al momento de freírse u hornearse. O sea, una empanada jugosa, que es lo que se pide. ¿Recuerda Ud. los elogios que se prodigaban a las empanadas que hacían chorrear su jugo por el brazo hasta el codo cuando se las comía de pie? ¿No? Pues no sabe Ud. lo que es una buena empanada chilena comida en la era o mirando un rodeo.
Así, no más, ha ido decayendo la calidad de lo que come el "chilensis" por estas fechas: ya no asados, sino unos anticuchos lamentables; menos pipeño y más "terremoto", uno de los bebedizos más atroces que se han inventado en los últimos tiempos, lleno de azúcares y gorgoritos, para parecerse a las "bebías" con que lentamente se va envenenando -y engordando- el compatriota. ¡Y esas empanadas de pino mazamorriento de carne molida, con una masa descuidada y una cocción hecha a toda carrera!
¿Rezongos de viejo'e miéchica, que se figura que "todo tiempo pasado fue mejor"? No, Madame: rescate. ¡Rescate!
Huevos chimbos
Bata 9 yemas y un huevo entero 20 min, con batidora eléctrica. Enmantequille molde de 20 cm de alto. Vierta el batido hasta 1/3 de la altura. Hornee a bañomaría 30 min, fuego moderado. Está listo cuando una hoja de cuchillo enterrada en el batido sale limpia. Enfríe en el horno. Desmolde. Bañe largamente con abundante almíbar espesa vainillada, para que se empape. Clavetee con almendras partidas.