Galería XS hace de Pilar Mackenna su actual expositora. Se advierten cambios respecto de su obra anterior. Así, desde los fragmentos de vegetación transita ahora a dibujos y pinturas sobre amplias láminas de papel en blanco con apariencia de ilustraciones, de diagramas para un libro de ciencias naturales referente ya a botánica, ya a horizontes geológicos. Pero lo interesante de ello es que la apreciable abstracción de las estructuraciones edafológicas y de la morfología vegetal constituye el punto de partida para llegar hasta la imagen real y bien reconocible de suelos y de esencias vegetales. Llaman la atención en todos estos desarrollos rigurosos la delicadeza y vigor lineales, la justeza del refinado repertorio cromático. La propia cualidad multicolor inyecta unidad y dinamismo a estas sumas de fragmentos de individualidad indudable.
Dentro del mismo ámbito formal, muestra la artista construcciones, a la vez sencillas y ricas. Se basan en restos naturales encontrados, los cuales barniza, pinta, ensambla, carboniza a veces y transformados en volúmenes esbeltos, ligeros dentro de un repertorio abstracto muy variado. Dispuestos sobre una simple mesa, emergen cual muestrario de un gabinete de física o de los logros inesperados de un laboratorio de experimentación.
Francisco Corcuera expone en los dos pisos de la contigua Galería AMS Marlborough. Por azar, sus imágenes poseen cierta lejana vinculación temática con las del conjunto anterior. No obstante, aquí se trata de estudios geométricos -círculos insertos sobre cuadrados y paralelas rectas verticales- convertidos en legítimos protagonistas. Ellas hacen recordar las circunferencias con tiza blanca, ejecutadas a pulso sobre las negras pizarras de antaño. Hay cierto destello de nostalgia en estos trabajos de amplio formato, entre los cuales los más carentes de coloración podrían considerarse el meollo de la exposición. Pero, además, cada cuadro adquiere la aparente condición de collage, debido a la importante y abundante concurrencia de papeles pegados, Estos, que introducen la nota cromática, responden al recurso de un bien ejecutado
trompe l'oeil. El pintor, sin embargo, tiende a abusar de una fórmula semejante.
En una de estas telas grandes recién anotadas -la realizada en grises y con toques de azul- se mantiene el efecto espacial de grandes planos, un atributo destacable de la producción pasada de Corcuera. Por su parte, en el piso alto de la galería, encontramos trabajos de dimensiones menores del mismo autor. Si en algunos de ellos aparece la concurrencia de un asunto suyo anterior, la concha de bivalvo, asimismo cuelgan ensayos de informalismo que no llegan del todo a buen puerto.
En comparación con su obra anterior, tanto en lo temático como en lo formal, Pablo Ferrer -Galería D21- hoy nos propone, mayoritariamente, situaciones de caída. Aunque por momentos pecan de heterogéneas entre sí, cortando el desarrollo narrativo global, domina el asunto capital. Son, pues, diez papeles en amplias dimensiones que, mediante óleo y carboncillo, nos cuentan historias a veces divertidas o románticas, otras irónicas y hasta trágicas; eso sin dejar de lado el toque surrealista en el "Trío amoroso". En cuanto a género, bien podrían considerarse antes dibujos que pinturas. Los frecuentes escenarios vacíos tienden a corroborarlo. El repertorio resulta muy variado y de logros plásticos desiguales -principal ejemplo de esto último, los dos personajes cayendo junto con columnas y edificios-, si bien es siempre entretenido de seguir.
Por el contrario, el más granado aporte del conjunto nos parece el bañista arrastrado por las magras aguas del río Mapocho, cuya factura armoniosa, entorno muy bien establecido, cuyo acorde de color, y tratamiento original de la perspectiva corresponden del todo a una pintura de especial madurez. Agreguemos el bien delineado desnudo de "Perrito faldero", especie de homenaje a dos épocas culminantes de la historia del arte. Y si de pasado lejano se trata, dos estampas recogen las iluminaciones de libros, aunque se apartan por entero del resto de los asuntos de caídas.
No podemos dejar de recordar, póstumamente, a un grupo de seis fotógrafas mostrado por el MAVI, de modo muy irregular, durante el recién pasado mes de junio. Debido a los varios días de atraso en la fecha de su anunciada inauguración, y al inhabitual corto tiempo expuesto, puede decirse que fue un evento que pasó sin pena ni gloria. Se trataba de autoras seleccionadas por nuestra Premio Nacional de Arte Paz Errázuriz alrededor de un argumento común. Si bien casi todas eran nombres poco conocidos, ofrecían personalidades bien identificable junto a facturas impecables. Una lástima para nuestro público.
Viento norte De Pilar Mackenna Atractivas fragmentaciones que transitan de lo abstracto a la realidad
Lugar: Galería XS
Obras reciente del pintor Francisco Corcuera
Lugar: Galería AMS Marlborough
Fecha: hasta el 28 de julio
Otras caídas de Pablo Ferrer Variadas historias a través de registros expresivos diversos
Lugar: Galería D21
Fecha: hasta el 19 de julio