Florence + the Machine - "High as hope"
Desde "Dog Days Are Over" hasta "What Kind of Man" -prólogo y epílogo de su más ilustre catálogo de singles-, Florence + the Machine era ante todo un vendaval: una tormenta atraída por el viento de una voz voluminosa y atmósferas instrumentales que explotaban en épica. Una poderosa intérprete que en "High as hope", su último lanzamiento, prefirió recluirse un poco más en sus memorias y, de paso, generar una sensación de calma a través de silencios musicales que hasta ahora no había experimentado.
Las virtudes de su discografía se mantienen y, de hecho, la británica Florence Welch aprovecha mejor el espacio que le da a su capacidad interpretativa. Sin embargo, el resultado final del álbum deja cierta impresión de vacío. El primer pero es que si bien cuenta con algunos temas que podrían incluirse en un "Grandes éxitos", en su mayoría son estructuras que ya hemos escuchado antes -el desenlace de "Patricia", dedicada a la heroína de la artista, Patti Smith, es muy similar a "How Big, How Blue, How Beautiful"-.
Y "High as Hope" está desprovisto de una coraza: las letras son más importantes que la música, su creadora se sumerge en una parte autodestructiva de su biografía (la familia, la distancia, el desamor) y el relato se sale de la canción convencional ("Hunger", otro de los sencillos, se pensó como un poema). Puntos que en su propia producción terminan jugándole en contra. Dicen que el paso de la tempestad trae la tranquilidad, pero Florence + the Machine funciona mejor en el caos. Uno que, en esta pasada, nos quedamos esperando.
Gorillaz - "The Now Now"
Paradójicamente, aunque Damon Albarn no se cansa de trabajar, su música sí alza la voz para bajar las revoluciones. El músico británico ha compuesto cuatro discos en cinco años, dos de ellos con Gorillaz -el combo animado que reactivó el año pasado después de más de media década en el congelador-, siendo "Humanz" (2017) un saludo a la sobreestimulación de la electrónica y al arrojo del hip hop. "The Now Now" (2018), en contraparte, transita entre la exploración y la introspección.
El también líder de Blur creó la música durante su última gira (que en nombre mutó de acuerdo al lanzamiento de cada álbum), la trabajó en su estudio en compañía de su compañero Jamie Hewlett y la grabó en el lapso de un mes. Cotidianidad e intimidad -Snoop Dogg y George Benson son dos de los únicos tres invitados- que se traduce en un grupo de canciones simples que arrastra su gusto por el funk y la música disco, ritmos que ajusta a título personal con un trabajo instrumental preciso y cautivante a la vez.
Si "Humanz" era reflejo de una fiesta veraniega que flirteaba entre la puesta de sol y las expectativas tras el impulso nocturno, "The Now Now" se asemeja a una playa que comienza a quedar desierta con la marcha de los turistas y la arena desnuda recordándote que cada paso que diste en la temporada fue una suerte de oasis con fecha de caducidad. Quizás la metáfora que envuelve sus tímidos intentos por incluir en sus letras algunos temas no banales como los conflictos de la sociedad actual. Como si los intentos por mejorarla estuvieran destinados a fallar y desvanecerse.