Es, sin duda, la más compleja película de Marvel y también una de las más logradas, porque el director Taika Waititi (autor del notable mockumentary o documental falso de vampiros "What do we do in the shadows") puso remedio en lo complejo: Thor, uno de los paladines más planos de Marvel, logra relieve gracias a buenas dosis de humor, aventura de matiné y mucho de la fantasía heroica que bien conocen los nerds lectores de revistas como "Heavy Metal". "Thor: Ragnarok" corre a dos tiempos: en el mundo de Thor, con la villana Hela (una correcta Cate Blanchett), y en un planeta basurero donde el dios del trueno cae en desgracia y debe ganar un torneo de gladiadores para salvar su mundo. Ese segmento, lo mejor de la película, se distancia de la fórmula de superhéroes para entrar en otro y mejor registro, tanto para el público como para el ahora mucho menos fome Thor.
Aventura. EE.UU., 2017. 130 minutos. Todo espectador.