Poco sabemos los chilenos, aun aquellos con enseñanza universitaria, de las heroínas de nuestra historia.
Hay una mujer chilena que trabajó arduamente y corrió riesgos de vida por salvar niños judíos durante la dominación nazi en Europa. Al principio sacaba bajo su capa a niños judíos escondidos en hospitales, para llevarlos a casa de alguna de las familias de una red de colaboradores que los acogía. Daba apoyo económico para mantener y nutrir a los clandestinos e intentar sacarlos de una Francia ocupada por los nazis.
En 1943 empezó a esconder niños en su casa, hasta que el 19 de diciembre de ese año fue descubierta y brutalmente torturada. Tuvo la fuerza de no entregar a ningún miembro de la red clandestina ni dar información sobre la forma en la que esta operaba. Dos oficiales alemanes fueron designados para cuidar la puerta de su departamento. Terminada la guerra, esta mujer se dedicó a tratar de reunir a los niños con sus padres, la mayoría muertos en campos de concentración. Pero era una tarea agotadora: solo se podía encontrar información por la vía oral, ya que no habían registros. Buscó entonces familias que los adoptaron. Salvó al menos a 60 niños que pudieron retomar vidas normales.
En 1953 recibió la medalla de Gran Canciller de la Legión de Honor, entregada por el gobierno francés. Y recién en noviembre del 2006 recibió el reconocimiento póstumo de "Justo entre las Naciones". Se convirtió así en la primera mujer latinoamericana en recibir este reconocimiento, por haber salvado niños judíos durante la Segunda Guerra mundial. Su nombre es María Edwards.
El reconocimiento internacional no basta para que las chilenas tengamos heroínas propias. Muchas, como yo, no conocían esta historia. Y necesitamos conocerla. Esta y tal vez muchas otras, que debieran estar en los libros de historia para que desde chicas sepamos que la valentía es un valor.
Una de las críticas que se hace a la educación formal en Chile es que los roles femeninos de la historia son eso, nombres.
De ahí la pregunta: ¿somos ingratas las mujeres chilenas al no homenajear a mujeres como esta o simplemente nos unimos al machismo latente al no mencionar y estudiar y comprender cómo vivieron estas mujeres heroicas las contradicciones de tener hijos y exponer la vida?