Es el líder mundial del vino espumoso, elaborado con el método tradicional de la champaña (Francia): Freixenet. Aunque tiene muchos productos, su Cordón Negro es infaltable en cualquier celebración del planeta. Cada Navidad, toda España espera con ansias el aviso publicitario de "las Burbujas de Freixenet", una cuidada producción en la que han participado los más destacados rostros de la televisión, deportistas y artistas del mundo. Es una tradición que obliga cada año a seguir sorprendiendo.
La Vinoteca trae varios de sus productos y hay que probar el Brut Vintage, reserva 2008, un cava de carácter, pero delicado, para conocedores. Es un espumante con un equilibrio perfecto entre acidez y cuerpo, por $ 12.900.
Y con gran éxito -lleno permanente de sus mesas- se inauguró en Santiago el Café Bar San Juan, sucursal de los tres establecimientos que tiene en Buenos Aires el televisivo chef Lelé Cristóbal, quien con sus tatuajes e informal aspecto se convirtió en una celebridad. En calle Bilbao, en el comienzo del barrio Italia, se instaló con la misma estética y buen servicio que lo caracteriza. La música estupenda y el bar, lo mejor de la experiencia. Los precios no son baratos para establecimientos similares, pero sigue copando sus mesas, muy cerca unas de otras. ¿Su cocina? Difícil hacerse una opinión, porque tiene platos logrados y otros que fracasan por fallos en su preparación. Dentro de los montaditos en baguette, el de pasta de berenjenas ahumadas con tahine y nueces resultó una decepción porque la pasta estaba recién sacada del refrigerador. Fría con un pan tostado... mal.
El arroz basmati, salteado con panceta y vegetales, soya, sésamo y langostinos en almíbar de jengibre, rico pero nada para morirse. Un correcto ojo de bife con chimichurri y papas salteadas. En síntesis, una experiencia irregular, con un mejor bar que cocina.
CAFÉ SAN JUAN
Dirección: Bilbao 765
Reservas: 23265 7816
Precio por pareja: $62.000
Cerrado lunes y noches de domingo