Harry Styles - "Harry Styles"

Harry Styles es un artista en construcción. Tras el hiato indefinido de One Direction y la confirmación del comienzo de su carrera solista, el británico dejó a un lado las concesiones propias de un proyecto creado en la televisión como la boy band y zarpó en la búsqueda de su destino. "Sign of the times", ese inmenso primer single que bautizó su debut homónimo -atreviendo a la prensa a ligarlo a Bowie, Queen o Robbie Williams-, fue el fiel reflejo de una exploración alejada de los cánones expuestos por el grupo que lo lanzó a la fama.

Su aventura en solitario también tiene la mira puesta en los números, las descargas digitales, las reproducciones en streaming y los primeros puestos de los rankings de ventas, pero las fórmulas son distintas. En las 10 canciones que componen "Harry Styles" hay un viaje hacia el rocanrol y un especial gusto por la unión entre la balada acústica y la introspección. Al mismo tiempo, el músico va tanteando qué tanto debe exponer su vulnerabilidad o qué sonidos se acomodan de mejor forma a su voz, como un simulacro de lo que viene hacia un eventual segundo álbum.

El ex One Direction estaba nacido para triunfar: tenía la facha, el carisma y el talento para convertirse en el ídolo de una prensa local afanosa en su búsqueda de nuevos íconos. Siempre estuvo a la vanguardia de la boy band y ninguno de sus compañeros suscitó tanta atención y expectativas sobre sus respectivos futuros musicales como lo que podía hacer él. Y si bien su debut discográfico no fue el álbum trascendental que se esperaba, puede ser el prólogo de una carrera que apunta tan alto como la grandeza de su primer single.

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Natalia Lafourcade - "Musas" Si para un músico los títulos de sus álbumes fueran la historia que dicta su música, Natalia Lafourcade habría presentado su más reciente disco, "Musas", con antelación. En 2015 cantaba "Hasta la raíz" como una figura que revisitaba el pasado a través del sentimiento del amor y ahora, en su nuevo trabajo, la artista mexicana juega con los mismos conceptos, homenajeando a la canción folklórica latinoamericana y a cada uno de los artistas y elementos que la influenciaron durante su carrera.

Lafourcade creó este proyecto de una manera muy personal. Ella lo tildó como "un capricho", en el que cumplió su deseo de colaborar con Los Macorinos (el dúo de guitarras de Chavela Vargas formado en 2004), luego preparó las canciones a escondidas de su sello discográfico y solo las hizo públicas cuando el trabajo estuvo listo. No quería que nadie más que ella y sus músicos dictaran los límites de su muestra artística.

Y el resultado es de una intimidad emotiva. La cantautora reversiona a Violeta Parra en "Qué he sacado con quererte" desde la admiración: no canta desde las vísceras como la imprescindible artista chilena, sino que toma un tono ceremonioso cautivante. Además, la curatoría del disco destaca con clásicos del bolero como "Tú me acostumbraste" -en un cándido dueto con Omara Portuondo- y con un relato autobiográfico llamado "Mi tierra veracruzana", donde la artista pinta un mundo colorido en el que regresa a su lugar de nacimiento. Natalia Lafourcade desnuda sus raíces y florece su discografía.