Kasabian - "For crying out loud"
Pareciera que Sergio Pizzorno y Tom Meighan, los líderes de Kasabian, se han llevado 13 años pasando un buen rato, bebiendo cerveza refrescante y echando la talla. La pareja desde su debut discográfico homónimo de 2004 que demostró tener personalidad avasallante, visceral, y el talento como para ser considerada uno de los grandes proyectos musicales del nuevo siglo en Reino Unido. Lamentablemente para sus pretensiones, de nuevo lo primero sigue traicionando las posibilidades de lo segundo.
Los nacidos en Leicester lanzaron "For crying out loud", su sexto álbum de estudio, cayendo en las mismas inconsistencias de sus trabajos anteriores. Pizzorno -el principal compositor de la banda- demoró tan solo seis semanas en construir el trabajo, y ese sentido de apresuramiento se traduce en un disco que promete de entrada la cruza entre el rock de guitarras punzantes de Arctic Monkeys y con el impulso bailable del dance punk, pero a poco andar se pierde en el alza protagónica del formato semi-acústico y psicodélico.
Aparte de "Ill Ray (The King)", "You're in love with a psycho" y "Twentyfourseven", las tres primeras que engalanan una placa que anunciaba chispa, aparece otro par de buenos momentos como un glamoroso viaje a la música disco en "Are you looking for action?" y un arranque de desfachatez en "Comeback kid", burlando y rescatando, a la vez, a esos que se quedaron en el camino. Incluso la balada britpop "Put your life on it" funciona, aunque en un momento en el que ya perdieron la mitad de la atención por creer en su genialidad ininterrumpida. Kasabian siempre deja algo nuevo, y harto relleno entremedio.
At The Drive-In - "In*ter a*li*a"
Hace 17 años, At The Drive-In inauguraba el milenio con uno de los mejores álbumes que dejó la década pasada. "Relationship of command" (2000), además, marcaba el punto final en la carrera de los titanes del post-hardcore. La banda se dividiría en dos: por un lado, Sparta; por el otro, The Mars Volta. Y tras una pequeña reunión en el año 2012, tocando en Coachella y Lollapalooza, el conjunto liderado por el frontman Cedric Bixler-Zavala y el guitarrista Omar Rodríguez-López renueva su poderío instrumental con el lanzamiento de "In*ter a*li*a".
Hace 17 años, At The Drive-In daba un paso adelante en la base rítmica del hardcore emo, acompañándose de sintetizadores para expandir las posibilidades de un coro de guitarras que rugía con cada nota. Se adelantaba al futuro definiendo un sonido que hoy recupera bajo la misma fórmula, con un trabajo donde la intensidad asume el papel protagónico. Se oye fuerte y desenfrenado, con canciones que se vuelven delirantes en sus constantes cambios de velocidad, inhabilitando la tranquilidad, como un retrato de la vida actual.
Hace 17 años, At The Drive-In construía su universo desde la paranoia, identificando a la máquina como enemiga, mirando las estrellas, y metaforizando con el espacio y los misiles una guerra que estaba por venir. "In*ter a*li*a" es el resultado de la hecatombe, la reseña de una sociedad post-apocalíptica que aún intenta resistir a sus propios embates tras perder la batalla. El conjunto lo vaticinó y eso tiene a sus compositores todavía más inquietos.