Ben Affleck escasamente mueve un músculo facial, pero más que un defecto, es una fortaleza en este thrillercorrecto, de manual y sin ninguna sorpresa: Affleck es un contador silencioso, con síntomas de autismo, inexpresivo y durante su atormentada infancia, que se muestra a través de flashbacks, se reconstruye su formación como si se tratara de la manufactura de un superhéroe: por su padre militar, es entrenado en combate y armas, y lo que hay en el presente es un literal superhéroe con identidad movediza y negocios sucios con la peor ralea de la Tierra. Con un mejor apretón de tuercas, la historia hubiera sido mejor que la buena promesa inicial que, a medias, se cumple. Confabula la pésima química con Anna Kendrick y la subutilización de dos secundarios grandes: J.K. Simmons ("Whiplash") y Jon Bernthal ("Sicario"). Entretenida y algo como un "Batman" sin disfraz, pero con saldo en contra considerando los talentos involucrados.
"The Accountant". Thriller. 2016. 128 minutos. T.E.