Le costó calentar motores al nuevo programa de debate político de Canal 13, "En buen chileno", que debutó antenoche, a las 23:35 horas. Los primeros 15 minutos transcurrieron con los panelistas muy compuestos, respondiendo las preguntas que el conductor Iván Valenzuela les hacía sobre las críticas al sistema de pensiones. Sin interrupciones ni salidas de madre y con un manejo de cámaras plano, el programa amenazaba con ser un excelente inductor al sueño.

Pero en el minuto 15, el panelista Luis Larraín (director de Libertad y Desarrollo) afirmó que la marcha contra las AFP fue convocada por sectores cercanos al Partido Comunista. Saltó Patricio Fernández (director de The Clinic) para retrucarle que, de ser así, el PC estaría en su mejor momento desde los años 70. Recién entonces se encendió la chispa del debate y la pantalla por fin se dividió para mostrar las reacciones de los distintos panelistas.

Entonces, el programa "despertó" y dejó ver, entre otras cosas, a una potente figura televisiva: Pilar Molina. Periodista que se ha desempeñado principalmente en prensa escrita y radio, aquí se reveló como la reina de la discusión y la ironía. No dejó pasar una y las pesadeces a sus contertulios le salían del alma. Hasta Patricio Fernández, que había sido el más intenso panelista de "Alerta temprana" (canal de cable Vía X), se veía moderado y cauto al lado de la pasión que desplegó Molina. Jorge Burgos, ex ministro del Interior, y Luis Larraín, experimentado panelista de radio, mantuvieron un tono parejo y pulcro en la exposición de sus puntos.

Pero más que el tono de la discusión, que fue agarrando vuelo, lo que se extrañó en el panel de "En buen chileno" fue una mayor diversidad de personajes que dieran cuenta de las distintas voces que hoy conviven en la sociedad chilena. "En este mismo panel estamos reproduciendo una cosa medio noventera, que ya viene siendo hora de que se descomponga", dijo Patricio Fernández, aludiendo a la clásica confrontación entre la Nueva Mayoría y Chile Vamos. ¿Qué rumbos tomaría la discusión si allí hubiera representantes de los movimientos sociales, de los mundos académicos o de otros conglomerados que están buscando expresarse?

Los panelistas ya están elegidos, pero siempre es posible incorporar voces que contribuyan a salir de los paradigmas habituales de la discusión política en televisión, más aún en tiempos en que la sociedad parece ir por caminos paralelos a los de los partidos. La primera edición de "En buen chileno" sumó un promedio de 6,1 puntos de rating entre las 23:35 y las 00:31 horas. En ese horario, Mega marcó 20,1 puntos, TVN, 10,3 y Chilevisión 6,7.