Alejandro Magnasco, gerente comercial del grupo Monarch, se pone una peluca y una barba postiza; y en vez de su chaqueta, una polera y un polerón con capucha. Está listo para iniciar sus 10 días como Jorge Araya, un "aprendiz" en la fábrica de su familia, cuya verdadera identidad pasará inadvertida entre los trabajadores. Es la versión chilena de "Undercover boss" ("El jefe encubierto"), un exitoso formato de docurreality inglés que se ha reproducido en varios países y que Chilevisión estrenó anoche en su franja estelar.
La odisea de Magnasco por los diferentes puestos de trabajo de su empresa es un ejercicio interesante. El ingeniero se estresa tratando de manejar las máquinas, queda con la espalda en la mano tras su jornada en la bodega y vive momentos incómodos intentando vender medias. Mientras trabaja, se relaciona intensamente con quienes le enseñan los distintos oficios y en las breves horas de colación conoce más sobre sus vidas. Se entera de que su encargado de bodegas, Jaime Villagra, está a cargo de su madre octogenaria, quien debe operarse de la vista pero no tiene los recursos para hacerlo en el corto plazo; también de que Verónica Torres, la veloz envasadora de panties, aún no supera la muerte de su hijo ocurrida hace algunos años y que se desvela pensando en cómo conseguir la suma que necesita para trasladar sus restos en el cementerio.
El relato de esta aventura se hace entretenido, ágil y logra emocionar. En relación a la versión extranjera del formato, aquí veremos menos grandes trasnacionales y más empresas locales. Se echa de menos una dimensión más personal del jefe encubierto. La opción de los realizadores en Chile -Fábula TV- fue la de centrarse más en los trabajadores: de ahí el nombre "El jefe en tus zapatos". En "Undercover boss", los ejecutivos encubiertos suelen tener historias potentes y personalidades que le dan chispa a la historia. En este primer capítulo, eso no se da; pero de todos modos, el resultado vale la pena porque muestra un encuentro que no suele verse en el mundo laboral y que puede dar frutos de entendimiento entre los distintos estamentos de una empresa.
Tras la experiencia, Alejandro Magnasco dijo que la información que obtuvo le servirá para introducir algunos cambios en distintas áreas de la compañía. También para conocer de cerca las "cargas emocionales con las que la gente viene a trabajar" y para constatar que sus trabajadores están con la camiseta puesta. Para el televidente, es interesante presenciar este ejercicio de empatía: qué le pasa a una persona al ponerse en los zapatos de otra. Y ese proceso lo vive Magnasco, no sus empleados. Por eso, es inevitable que el protagonista sea el jefe encubierto.
El espacio de CHV debutó cuarto en sintonía con 8,3 puntos, con un peak de 10. Entre las 22:36 y 23:25, fue superado por Mega (22,9), TVN (16,8) y Canal 13 (11,1).