Entre tanta desgracia de los últimos días, una buena noticia para pasar el invierno, descubierta por pura casualidad en los estantes de un supermercado Lider. Sorpresa y noticia deliciosa, ideal para pasar el frío con harto sabor: la distribuidora Globeitalia acaba de traer a Chile los famosos caldos Gallina Blanca. Y aunque podrá sospecharse (nunca faltan los suspicaces) de tanto entusiasmo en una columna, aquí no hay nada más que ganas de compartir un dato estupendo.
Gallina Blanca, marca líder en España, especialistas en darles sabor a las comidas. Y su producto estrella son los caldos preparados: ciento por ciento naturales, sin preservantes ni potenciadores del sabor. Vienen en envases de un litro, de tetrapack, con una cómoda boquilla con tapa, por lo que se puede usar, cerrar y guardar en el refrigerador.
¿Por qué son tan exitosos en España, donde comer bien es preocupación a todo nivel? Porque hacen lo más difícil. Producir un caldo verdaderamente natural, que puede usarse como base para todas las preparaciones. De pollo, carne, verduras y paella: son el inicio de cualquier plato. La quínoa, por ejemplo, cocida en caldo de verduras o pollo resulta sencillamente genial. O un modesto arroz, para salir pronto de un almuerzo, con el caldo para paella se convierte en un éxito.
El tiempo es lo más escaso en la cocina y hacer un caldo es lento. Su sabor depende mucho de los ingredientes y de su cocción tranquila y sin prisas, lo que dificulta a quienes deben trabajar fuera de casa. Cuando se llega cansado, nada mejor que calentar un caldo de pollo, ponerle un poquito de cilantro, un huevo duro picado y, si hay, pollo desmenuzado (que puede haberse dejado de un plato anterior). Incluso un poco de arroz y se tiene una sopa deliciosa en cinco minutos. Y al de carne, ponerle unos fideos. En internet, Gallina Blanca tiene un amplio recetario que merece la pena revisar.
Los venden en la tienda de Globeitalia (Av. Las Condes 6903. Fono: 22202 3593) y ya se distribuye en los supermercados Lider, a más o menos $1.790 la caja. ¡Para ponerse a cocinar de inmediato!