La ONU declaró este 2016 como el Año de las Legumbres, por el alto valor nutricional del alimento y la importancia de su consumo en el mundo. Suena casi divertido, pero el pasado 11 de marzo, por ejemplo, se celebró el Día de la Lenteja. Ni más ni menos.
Hay que remitirse a lo que el
Larousse Gastronomique define como lenteja: "Pequeña semilla de una leguminosa... redonda, seca y plana, encerrada de dos en dos en una vaina y de la que existen distintas
variedades. Se consume pelada y cocida. Originaria de Oriente Medio, la cultivaban ya los egipcios, que enviaban barcos enteros de lentejas a la Roma Imperial".
Continúa señalando: "Nutritivas y energéticas, son ricas en prótidos, glúcidos, fósforo, hierro y vitamina B. Se cuecen y preparan como los porotos, pero no es necesario remojarlas. Calientes se emplean como guarnición, así como en potajes, cremas y purés". Y esta Semana Santa, nada mejor entonces que unas buenas lentejas con papas, color y huevito molido por encima. Totalmente apropiadas.
Y para aprovechar estas tardes otoñales, en las que el calor aún aprieta, están las terrazas para conversar y ver cómo anochece: es un panorama que no conviene perderse. Por eso hay que visitar de nuevo al Stanberg, ese alemán de Alonso de Córdova convertido en un clásico y que no falla.
El servicio continúa a cargo de garzones experimentados, que sugieren y corrigen sin preocupaciones. "Le viene mejor unas papas al perejil que en ensalada"... y tenía razón. El pan calentito y variado, con mantequilla y un crudo glorioso, al gusto y sin queja alguna.
El pernil, alucinante. Blandito y bien cocido, con su capa crocante, que es devorada a sabiendas del taponeo de arterias que se producirá con posterioridad. Aquí lo preparan como toda la vida, siempre un placer para la vista y el gusto.
Buenos ingredientes, sin sorpresas, para volver y encantarse. No cabe duda.
STANBERG
Dirección: Alonso de Córdova 2359
Reservas: 229535100
Precio por pareja: $30.000
Abierto de lunes a domingo, de 10.00 a 23.00 horas