Macklemore & Ryan Lewis - "This unruly mess I've made"
Macklemore habla del robo de la cultura afroamericana por parte de los blancos en "White privilege II", al cierre de su último disco "This unruly mess I've made", y también habla de su propia incomodidad. Porque el rapero rubio entiende que, sin quererlo, es parte de esa ecuación. Del lado privilegiado, obviamente. Pero el ejercicio que intenta realizar en su más reciente trabajo, en compañía de Ryan Lewis -la otra mitad del proyecto-, lo aparta de esa zona de confort, porque se hace cargo de los problemas raciales en Estados Unidos y en su industria musical. Intentando liberar los fantasmas que lo aquejan desde el éxito que tuvo su segundo álbum "The Heist" (2012), cuando le arrebató un Grammy a Kendrick Lamar en 2014.
Macklemore & Ryan Lewis en "This unruly mess I've made" evidencia los problemas de su país, como la inseguridad de la nación convertida en una máscara de falsa victoria traducida en la fama de las figuras pop, como Kanye West y Kim Kardashian, en "Light tunnels"; o la crisis de la prescripción de medicamentos que está arruinando económicamente a una parte de la sociedad estadounidense en la canción "Kevin" -con la colaboración de Leon Bridges-. Cada uno de sus cortes está envuelto en un sonido sombrío e introspectivo, en clave funk y R&B, pero que encuentra esperanza en la idea del artista de luchar por resolverlos, como lo hiciera con "Same love", single a favor del matrimonio homosexual que le dio un carácter humano a esa batalla.
"La pregunta es, ¿qué clase de hombre quiero ser? ¿Cómo quiero usar mi plataforma? Durante mucho tiempo, estábamos a salvo. Sobre el papel es más fácil, como una persona blanca, estar en silencio acerca de la injusticia racial. Pero no lo es, porque la injusticia nos afecta a todos", dijo el rapero a la revista Rolling Stones. Desde allí, el dúo de Seattle construye un disco que intenta decirle a la sociedad que el sistema y sus vicios pueden cambiarse desde adentro. Y que los "privilegiados" no responden a la raza, sino a su individualista estilo de vida.
The 1975 - "I like It when you sleep, for you are so beautiful yet so unaware of It"
Gracias a los ingredientes que forman la disciplina de The 1975, su descomunal éxito en el indie británico no responde a una casualidad. La banda formada en Manchester encuentra en su vocalista, Matthew Healy, tres tipos de frontman que han sobresalido durante las últimas dos décadas en el pop de la isla: andrógino como Brett Anderson, libertino como Pete Doherty, modelo como Harry Styles. Y en sus letras, la cantidad exacta de amor y desamor, más la inventiva juvenil que no deja dormir: sexualidad desatada, drogas, el miedo a la muerte, a la soledad y el descubrimiento personal y social. Universo que atiborra en su segundo larga duración, "I like It when you sleep, for you are so beautiful yet so unaware of It".
Influenciados por proyectos tan disímiles como My Bloody Valentine y Michael Jackson, los pop rockers del Reino Unido entregan un cóctel de canciones tan diferentes entre sí, que hacen ver a "I like It when you sleep, for you are so beautiful yet so unaware of It" como un trabajo impredecible, novedoso en cada corte. Desde el post-rock de "Lostmyhead", como sacado de "Valtari" (2012) de Sigur Rós, o el dreampop a lo M83 de "The ballad of me and my brain" -donde Matthew Healy demuestra toda su fuerza interpretativa-, hasta el sensual electro góspel de "If I believe you", The 1975 pasa de los géneros establecidos y juega con ellos de manera provocativa, que hacen del disco una obra a descubrir y redescubrir.
Si con su homónimo álbum debut, The 1975 ya había demostrado ese gusto por las melodías pop y las temáticas adolescentes, el cuarteto retorna aún más sugerente. Ser invitados a tocar por The Rolling Stones y Muse en sus shows en Inglaterra no hizo que, debido al éxito, se entramparan buscando una manera de sacarle más provecho a su sonido. En vez de eso, declararon su música como un arte en constante reinvención. "La única cosa que mi generación ha dejado es hacer las cosas mejor de lo que se hicieron antes", dijo el líder a The Guardian, sabiendo que el camino es a la inversa. Con esto, cada uno de sus nuevos trabajos llegará con la expectativa de "¿con qué nos sorprenderán esta vez?".