Santiago a Mil es hoy inabarcable. Nadie podría ver todo lo que se ofrece: teatro y danza internacional, compañías nacionales de Santiago y de regiones, espectáculos de calle, nuevo circo, performance de arte, música, talleres. Trae conjuntos artísticos de prestigio internacional que no llegarían por otros caminos. La enorme cantidad de espectáculos gratuitos de calle en comunas y en regiones atrae literalmente a miles de personas. Con diferencias de estilo y de orientaciones, todo tiene una alta calidad. Ya no es un festival, es un movimiento que en sus 22 años de existencia ha cambiado las artes escénicas en Chile y ha contribuido a su desarrollo en otros países de Latinoamérica. Su influencia en el ámbito artístico y cultural supera a toda otra institución pública o privada.

Tuvo un doble comienzo el domingo 3 de enero. En el Teatro Municipal de Santiago, la compañía inglesa dirigida por el coreógrafo Hofesh Shechter presentó danza moderna, "Political Mother" , y en la plazoleta frente al Mercado Central se inició "Reinas de la calle", en que tres personajes de obras de Shakespeare presidieron un pasacalle. Estuvieron presentes lo selecto en el Teatro Municipal y lo popular en el centro de Santiago y en un lugar simbólico para Chile y para el festival, la Plaza de la Constitución, frente al Palacio de La Moneda.

"Political Mother" es danza moderna. Frente a la grácil formalidad técnica del ballet clásico, la danza de Hofesh Shechter es centralmente energía en movimiento. El sonido inundó la gran sala del Teatro Municipal como nunca antes. Con técnica excepcional logró que todo el espectáculo estuviera siempre dentro de una bruma que lo hacía más sugerente y acentuaba los efectos de los rayos de luz. El espectáculo se compone de cuadros independientes, cada uno con un sentido distinto. Por los enérgicos movimientos de dúos o grupos, uno comienza a comprender que algo presiona a quienes danzan, se percibe su temor y desconcierto. No es claro qué sucede, pero es indudable que sufren coerción. Entre las brumas, aparece un letrero en luces azules "Where there is pressure, there is folk dance", frase que explica el sentido de la obra. Hofesh Shechter hace que sus músicos toquen sus instrumentos con la mayor potencia, que los rayos de luz salten en forma alucinante, que los movimientos de la danza tengan la máxima fuerza, porque tenemos que sentir en forma potente lo inaceptable de las presiones que ejercen grupos totalitarios sobre el pueblo y que la danza es una forma de liberación.

Otra gran obra fue "El Select" , de la compañía neoyorquina Elevator Repair Service, dirigida por John Collins. Es un irónico e irreverente "homenaje" a Hemingway. Los grandes problemas de los personajes de una de sus novelas más famosas, "Fiesta", son, a lo más, insuficiencias físicas o emocionales, las conversaciones son discusiones de borrachos, la bella e inaccesible aristócrata inglesa no es nada inaccesible, el seductor y viril torero es más chico que su admiradora y lo interpreta una actriz. Todo el poderoso mundo varonil de Hemingway es una caricatura. "El Select" admira por la calidad de las actuaciones. Jake, el protagonista, se apoya en una mesa y comienza a contarnos la historia con sorprendente naturalidad. La obra conserva durante todo su desarrollo la calidad narrativa del texto y, a la vez, emplea ingeniosamente los recursos del teatro. Pasamos de Francia a España, entramos a bares, subimos a taxis, nos introducimos a un dormitorio estando siempre en la misma decoración de un elegante bar antiguo. La gran plaza de toros aparece con solo despejar el centro del escenario y el terrible toro miura surge al pegar un par de cuernos a una mesa y empujarla con las patas de atrás levantadas. Elevator Repair Service hace teatro experimental con gran calidad en la actuación.

Máximas expectativas despertó la obra de Romeo Castellucci "Julio César, fragmentos" . El año 2008, su "Br.4.Bruxeles" presentada en el Museo de Arte Contemporáneo, se nos impuso por la belleza del mármol, por el insólito pero significativo diálogo de un niño de pocos meses con un robot y nos llenó de angustia por las brutales reacciones de un anciano convertido en policía. Castellucci es un artista plástico que en teatro elude las palabras y se expresa por imágenes y sonidos. Estos mismos elementos están en "Julio César, fragmentos" que nos trajo en esta oportunidad. La obra se desarrolla en el gran hall central del Palacio de Bellas Artes. Desde el segundo piso baja y se extiende un lienzo en que se proyectan imágenes que parecen abstractas, pero son la amplificación de lo que capta una cámara endoscópica. Un actor vestido como antiguo romano dice un texto en que una autoridad interroga con violencia a un pobre zapatero, el actor introduce la cámara endoscópica en su laringe y lo que vemos es el movimiento de sus cuerdas vocales mientras dice las palabras. El diálogo con el zapatero no tiene relevancia, lo que importa es mostrar que las palabras no son más que vibraciones de cuerdas vocales. En otra escena "vemos" el enorme poder de Julio César que no necesita de palabras. Después de meditar en silencio largamente, como han de hacerlo las autoridades, mueve un brazo y el aire se llena de sonidos, mueve el otro y parece que viéramos centellear arpegios. Es un hombre cuya majestad llena los espacios. Pero Bruto, en quien él confiaba, lo mata. Un tribuno amigo leal acude a enterrar a César y expresa su lamento, sus gestos son ampulosos y parecen elocuentes, pero no escuchamos con claridad lo que dice, modula sonidos extraños apenas audibles. "Julio César, fragmentos" es una obra sobre las palabras, se mal escuchan o nada significan. Está en consonancia con la actual desconfianza sobre los discursos y con el estilo de este director que se expresa más con imágenes, movimientos y sonidos.

Santiago a Mil ofrece múltiples espectáculos y acciones de arte. Algunos son populares y de fácil comprensión, otros están en los límites de la experimentación o de la radicalidad de las expresiones artísticas y son difíciles de interpretar. Todos nos conducen a indagar sobre la realidad y sobre sí mismo.