Con un nombre de lo más sugerente, hace poco menos de dos meses que se inauguró la nueva promesa del escenario gastronómico capitalino: Carnal, que ya triunfaba en Lima. Al más puro estilo de los steakhouse de lujo, el lugar está dispuesto para crear la atmósfera -mezcla de informalidad y refinamiento- que los caracteriza. Amplios salones, terraza y una gran barra. Todo de buen gusto, sobrio y de calidad. Y un punto importante: el servicio acompaña al lugar con garzones bien preparados y un encargado que se preocupa de todos los detalles. ¡Bien!
Aquí la cosa va por la carne, obvio, pero como advierten con orgullo: "Trabajamos solo con cortes de Angus Americanos certificados de calidad High Choice & USDA Prime, que sobresalen por su alto nivel de marmoleado". La carne es importada directamente del midwest estadounidense, específicamente desde Iowa: Estado que destaca por la calidad de su ganadería.
Para los expertos, un detalle no menor y que hace la diferencia es que las carnes se preparan en un horno broiler, que alcanza los 700 grados de temperatura, y dispone de un sistema de placas infrarrojas que le otorgan un calor más parejo y que impide que la carne se reseque.
En dos visitas se probó y aprobaron algunas de las especialidades: tres minihamburguesas, con cebolla, salsa y tocino, realmente increíbles. La carne era de la mejor de la plaza. Sin duda. Luego una ensalada con los corazones de la lechuga, sobre las cuales iba queso azul, tomates cherry y pedacitos de tocino, para acompañar cualquier carne. La entraña resultó al punto exacto que fue pedida. Tienen una tabla con los puntos de cocción, muy detallado, que se cumple. Las papas fritas Carnal, en un pote metálico, envuelto en papel, con trufa, son para gritar. Crujientes, sabrosas y adictivas. Hay que pedirlas, así como la tostada francesa de postre y un etcétera que quedará para otra visita. ¡Bienvenidos!
CARNAL
Dirección: Alonso de Córdova 3053, Vitacura
Reservas: 22717 6161
Precio por pareja: Cerrado domingos noche