La adaptación local de "Los años dorados", una recordada serie ochentera de los estudios Disney, es una buena noticia para la pantalla local. Porque por paradójica que suene, esta antigua comedia de situaciones basada en las vivencias de un cuarteto de mujeres de la tercera -y cuarta- edad significa un verdadero rejuvenecimiento de la ficción nacional.

Por un lado es una valiente apuesta de un canal pequeño, UCV-TV, más bien concentrado en espacios de conversación de bajo presupuesto, y, por otro, es un rescate del talento actoral de un grupo de actrices nacionales que en las teleseries de los grandes canales locales no alcanza a encontrar roles que les permitan mostrar su total vigencia -y hasta supremacía- profesional.

La industria de la ficción local es ambiciosa en propuestas, ya sea de temáticas o de géneros que se explotarán. "Los años dorados", en cambio, es una humilde muestra de que bastan historias simples y bien actuadas para lograr entretención.

El guión de la serie local fue adaptado por Luz Croxatto, actriz y escritora experimentada en el mundo de la TV. Y en esa localización de los contenidos de las cuatro amigas que viven juntas en la última etapa de su vida se ganó calidez al acentuar los nexos de familiaridad entre ellas, entre sus parientes y entre sus amistades.

Así, en "Los años dorados" no solo se representa la sin igual vitalidad de las mujeres mayores -divertidas, asertivas y sabias-, sino que también el choque generacional o social que esa representación puede generar. Los personajes de las siempre talentosas Gloria Munchmeyer, Anita Reeves, Consuelo Holzapfel y Carmen Barros se enamoran, se decepcionan, se pelean y se apoyan como muchas historias de protagonistas más jóvenes son incapaces de mostrar.

Estas actrices son capaces de defender solo con su portentoso desempeño una historia lúdica y positiva en horarios donde pueden perfectamente competir con las ambiciosas historias de los grandes canales y con la a veces prescindible última media hora de los informativos de la TV. Cada día, a las 19 o 22 horas, "Los años dorados" es un recordatorio de lo simple y cálido que puede ser la televisión.