"Dueños del paraíso" partió anoche en TVN, con Jorge Zabaleta haciendo de "chileno medio" en Miami, un personaje relajado y algo tránsfuga, que sobrevive en un condominio de mala muerte y vende marihuana a quien se le cruce en el camino. El actor juega sus cartas en el mismo registro de sus personajes en las teleseries locales: tipos que usan el humor y el desparpajo, y que consiguen vivir a su aire. Mantiene su acento chileno y no hace ningún intento de reinventarse para el público internacional.
Esta coproducción entre el canal estatal y la cadena estadounidense Telemundo partió hace una semana en el país del Norte y allí la primera escena no fue con Zabaleta. Fue con la actriz mexicana Kate del Castillo, ya consagrada en ese mercado, gracias a "La reina del sur", una exitosa narconovela de esa cadena. La mostró como Anastasia, la esposa de un narco, en medio de la celebración de su cumpleaños, que es interrumpida por una sangrienta balacera proveniente de un grupo rival de su marido. Ese capítulo logró un promedio de 2,3 millones de televidentes totales en Estados Unidos y se convirtió en el debut más visto de la historia de Telemundo.
TVN editó el episodio para darle más preeminencia a los actores chilenos, pero mantuvo la esencia del estreno: presentar a los principales personajes y mostrar sus transformaciones a causa de la violencia imperante. Un objetivo ambicioso que se cumple en esta primera entrega, a un ritmo vertiginoso y con escenas que no dan tregua. La producción no escatima recursos y las escenas de sangre son masivas y visualmente impresionantes. Ahí es donde queda clara la diferencia con una teleserie cien por ciento chilena. El aporte local debería ir de la mano no solo de los actores -que son muy pocos y entre los cuales Zabaleta es hasta ahora el más lucido-, sino del guionista Pablo Illanes. En este debut, él muestra sus armas: entra al mundo de la narconovela y busca retratar la cultura del Miami de fines de los 70, pero sin dejar los temas que lo obsesionan y que se repiten en muchas de sus historias: el trauma, el daño y la venganza que se originan en etapas tempranas de la vida.
El canal estatal se juega una nueva esperanza con esta producción. Su ilusión es subir el alicaído rating de su horario prime , que no ve buenos números desde el final de "Vuelve temprano". Y el desafío no es fácil. El riesgo es que "Dueños del paraíso" no es exponente de un género tan masivo como las románticas turcas. Pero no es imposible que una narconovela la rompa en Chile. Así ocurrió hace dos años con "El patrón del mal". Quizás eso dependa del espesor de los personajes y de cómo los chilenos se involucren con ellos.