Con claridad conceptual y vigor formal, Patricio Vogel -Co galería- enjuicia, presumido y coherente, desde la historia del arte hasta el saber de enciclopedias. Para simbolizar el proceso recurre a un presunto Archivo oficial, que solo conserva su fachada documental. Su decisivo interior, no obstante, se reduce nada más que a basura: recopilación del material muy arrugado, convertido en pelotas de papel arrojadas con desprecio. A través de intermediarios diferentes se concreta la empresa. Así, instalaciones con archivadores, con libros dentro de estanterías de metal constituyen su alegato más directo y flagrante. También lo encontramos como fotografías: basureros en cajas de luz o, sin ellas, como un papelero de reproducciones artísticas convertidas en desecho. Más transfigurado se encarna el enjuiciamiento ya mediante un par de pequeños cajones, en los que revistas culturales enrolladas muestran su porción central extirpada y vuelta vacío; ya como un grueso libro, avasalladas sus páginas por tubos fluorescentes que lo convierten, acaso, en cápsulas para tiempos futuros, provistas de burlones y breves manuscritos en inglés, por supuesto. Visualmente, los dibujos se apartan un poco del resto de lo mostrado. Constituyen cortes con láser sobre una enciclopedia; aunque no figurativos, sugieren siluetas, tanto de aves como de vegetales.
Como otras veces se ha hecho y con dispares resultados, La Sala encomendó a doce de sus artistas la intervención de un objeto, esta vez una bicicleta. Los trabajos obtenidos se han estado exhibiendo, hoy día el W Hotel sirve de escenario. Si el ejemplo dadá y el del pop art se hallan en el origen de la actual iniciativa, globalmente lo logrado tiende a desvirtuar su origen, no yendo más allá del aspecto decorativo. Felizmente, eso no impide que hallemos algunas realizaciones capaces de alcanzar algún grado de vuelo poético. Comencemos con un par de testimonios de ello. Es el caso de Mariana Kaplun: manteniendo intacta la imagen del vehículo de dos ruedas, consigue impregnarlo de un lirismo fundado en detalles de la intimidad personal. Por su parte, Loreto Enríquez lo metamorfosea en pájaro rojo con solo pedazos de Coca-Cola en lata. Si bien predomina entre los expositores esta tendencia a asociar bicicleta y vuelo, Verónica Allamand, más realista y evidente, precisamente otorga al vehículo un par de alas de convencional aire celeste y bien conseguidas escamas. La intervención más radical, sin embargo, corresponde a Ignacio Gana. Aporta una escultura tradicional. De aire minimalista, su gran aro metálico, junto a una coloración acertada, transmite sensación de equilibrio motriz.
Asimismo, La Sala presenta, esta vez en su recinto habitual, un heterogéneo conjunto de José Manuel Délano. Es cierto que su exposición gira alrededor del tema Babel y su confusión de lenguas; pero esa circunstancia no justifica las distintas vías de expresión en juego, que se traducen en diversidad de resultados. Tenemos, pues, desde esa construcción con bloques con serigrafías de ventanas o el rojo video rotatorio, o los numerosos platos de loza con dibujos, hasta sus conquistas más interesantes: los pasaportes, los bordados, los naipes. Consisten los primeros en un trabajo gráfico de una significación más profunda: personas de las más variadas nacionalidades unidas por su pertenencia a la República de Babel. Cierta adecuada solemnidad metafísica ofrecen, entretanto, los hilos dorados que, sobre lino liso, bordan el lenguaje bíblico. También convencen los relieves con cartas de naipe -siempre monocromías de reyes y reinas- y sus juegos geométricos.
Una crónica nocturnaEl fotógrafo publicitario Gabriel Schkolnick despliega, en Ekho Galery, un muestrario de situaciones acaecidas alrededor de las dos de la mañana. Subrayan esa hora metropolitana el adecuado empleo de la luz y del color. Aunque diestro e imaginativo narrador, ha perdido este la ocasión de entregarnos una verdadera y bien hilada epopeya visual de medianoche. Es que la heterogeneidad de las escenas captadas y de sus personajes -mucho más allá de que se trate de conocidos actores de teatro, cine y televisión nuestros- atentan contra la unidad del conjunto. Debido a eso, tenemos que conformarnos con destacar estampas solitarias, sin mayor vinculación entre unas y otras. En todo caso, tienen la capacidad de estimular nuestra curiosidad, nuestro registro asociativo, permitiendo al espectador inventarse historias diferentes. Todas de clara raigambre cinematográfica, abarcan ya el contraste entre traje de fiesta y sordidez callejera, ya el humor casi terrorífico que provoca un cirujano en acción, ya la atmósfera contemplativa del panadero en medio de su ambiente peculiar.
"El archivo de las cosas"Patricio Vogel y un enjuiciamiento, formalmente coherente, de la cultura oficial
Lugar: Co Galería
Fecha: hasta el 16 de noviembre
"Efecto Babel"La confusión de lenguas en la obra de José Manuel Délano
Lugar: Galería La Sala
Fecha: hasta el 16 de noviembre
"2-AM"Escenas fotográficas de un escogido recorrido nocturno de Gabriel Schkolnick
Lugar: Ekho Galery
Fecha: hasta el 30 de noviembre