Es entendible que todo el mundo hable, respire y consuma Mundial de Fútbol, pero dedicar dos horas y media de un estelar, tres veces a la semana, a hablar de esta cita futbolística y de todo lo que tenga relación con ella puede ser aventurado: porque están todos los medios hablando de lo mismo, porque los lugares y personajes se empiezan a repetir, porque hay que ser muy creativo para darle otra vuelta al rizo.
Antenoche, Canal 13 estrenó el tercer estelar mundialero de la TV abierta, "La movida del Mundial" y, como su antecesor de Chilevisión ("Locos por el Mundial"), se extendió entre las 22:30 y la 01:00 de la madrugada. En ese lapso, el estelar conducido por el trío Bolocco-Cárcamo-Lagos obtuvo un promedio de 10,2 puntos, ocupando el tercer lugar en ese horario tras Mega (21,5 puntos) y TVN (13 puntos).
"La movida..." partió con una colorida imitación del Carnaval de Río, con sus animadores disfrazados y bailando samba. Una fiesta prometedora, pero que evidenció demasiado estar pregrabada, ya que a los pocos segundos estaban todos vestidos y en su lugar presentando a los invitados: Paulo Garcés y su esposa, Joyce Castiblanco; Rafael Olarra, Rocío Marengo y "Dino" Inostroza, el mejor amigo de Alexis Sánchez, entre otros. El tema de la noche fue "el sexo y las concentraciones futbolísticas", para lo cual se echó mano hasta de un kinesiólogo que explicó qué posturas sexuales podían ser riesgosas para los jugadores mundialeros. Insólito.
A poco andar, la reiteración del tema se hizo majadera. Hay que reconocer que también se habló de fútbol, pero al poco rato Diana Bolocco insistía en hacer "oblicuo-selfies" y "photo-selfies", apelando al buen físico de los invitados. Los contactos con los "noteros" en Brasil partieron bien con un divertido encuentro entre Peter Veneno y Yerko Puchento, pero ya al cuarto "corresponsal" (Koke Santa Ana) haciendo payasadas con la gente en la calle, el recurso terminó por aburrir.
A pesar del bajo rating inicial, el programa no tendría por qué ser una apuesta fallida. Hay un buen entendimiento entre los animadores y ciertos momentos de ritmo adecuado. Pero ayudaría que fuera más corto y menos reiterativo en sus contenidos. También que hubiera un buen mix entre lo humorístico, lo lúdico y los contenidos que ayuden a entender las diversas dimensiones de esta fiesta. ¿Será mucho pedir?