La suerte le sonrió a Christian Garin (43º ATP) en Wimbledon. El chileno pasó de tener un rival muy complicado en el estreno a encontrarse con un lucky loser, que si bien le puso problemas, fueron muy bien resueltos por el “Tanque”, quien avanzó a la segunda ronda del Grand Slam londinense tras vencer al sueco Elías Ymer (137º) por 6-3, 7-5 y 6-4 en dos horas y ocho minutos de partido.

El sorteo no había sido benevolente con el ariqueño. Garín debía enfrentar en el debut al italiano Matteo Berrettini (11º), octavo cabeza de serie, finalista de la edición 2021 y uno de los favoritos gracias al triunfo que lo precedió en Queen’s. Sin embargo, Berrettini dio positivo por covid-19 antes de su duelo con el chileno y fue marginado del torneo.

“Llega mi entrenador, Pepe Vendrell, y me dice que se bajó Berrettini. Fue muy raro, porque era un gran favorito del torneo. Me puse un poco nervioso, no conocía bien a mi nuevo rival (Ymer), no sabía a qué hora jugaba. La gente se me acercaba y me felicitaba, pero aun tenía que jugar mi partido”, detalló Garín la forma como se enteró de que sería otro su oponente en el estreno.

Ymer, de 26 años, ya había conocido la mano del tenista chileno en una ocasión, cuando en 2014 se midieron en un challenger en Polonia que Garín ganó en dos sets. El sueco había perdido en la última ronda de la qualy, pero la deserción de Berrettini lo obligó a desenfundar la raqueta y enfilar hacia la cancha número 18, lejos del Court 1 que inicialmente cobijaría el duelo del jugador nacional con el italiano.

Más retirado de la atención mediática, Garín trabajó mejor los puntos contra su nuevo oponente, movió al escandinavo y se mostró más cómodo que él en el césped. En el quinto juego, el chileno logró romper el saque y un nuevo break en el noveno selló la disputa de esa manga, que a la postre fue el parcial más tranquilo de los tres que se jugaron.

En el segundo no comenzó bien el nacional: Ymer, quien había perdido en el debut en su única participación anterior en Wimbledon (2015), quebró de entrada y administró la ventaja hasta un largo sexto game (fueron 16 puntos), que marcó un punto de inflexión en el desarrollo del juego. Garín dio dura pelea, tuvo cinco puntos de quiebre a disposición ante la férrea defensa del sueco hasta que finalmente logró romper.

La larga lucha por materializar esa ruptura fue un golpe anímico para Garin, quien en los servicios sucesivos mantuvo su saque con solidez, mientras que Ymer se complicó y despidió el set con otro quiebre en contra.

Con dos sets en contra, Ymer arriesgó todo en el tercero. Salió a presionar, a mover a Garin. Y logró su premio cuando se adjudicó el servicio del ariqueño en el tercer game. Sin embargo, a esas alturas Garín sudaba confianza y no permitió que su rival se escapara: quebró de vuelta y fue el golpe letal a las aspiraciones del europeo.

En sus posteriores tres turnos de servicio, Garín apenas perdió un punto. Ymer no pudo más, y tal como en los sets anteriores, cedió su saque en el juego final para rendirse ante el chileno, quien empezó con el pie derecho su derrotero en Wimbledon.

“El cambio fue una sorpresa porque lo supe a las 11:30 de la mañana (hora local) y mi partido era a las 13 horas, así que fue drástico. Fue un juego difícil porque pasar de jugar en la cancha uno contra Berrettini a jugar con Ymer, que no lo conocía mucho, es un gran cambio, pero estoy contento de la forma como lo llevé”, explicó Garín.

La suerte, la misma que “ayudó” a Garin para aliviar su debut, le seguirá sonriendo. En la siguiente instancia, el chileno se medirá con otro lucky loser, el francés Hugo Grenier (141º), quien venció en cinco sets al suizo Marc-Andrea Hüsler (105º).

El “Tanque” tiene un panorama auspicioso: recién podría toparse con un rival de fuste en cuarta ronda, eventualmente con el argentino Diego Schwartzmann. Pero antes debe ir partido a partido en un torneo que, se sabe, no entrega puntos para el ranking, lo que fue criticado por el tenista nacional:

“Perjudica mucho. Las semanas que vienen son los cierres para los Masters de Montreal y Cincinnati, quedaré afuera de esos torneos y no voy a tener la posibilidad de defender mis puntos”, lamentó.

Con Garín y Alejandro Tabilo (78º) clasificados a la siguiente ronda de Wimbledon, se rompe un registro de 17 años sin tener a dos chilenos en esa fase sobre el pasto británico. Entonces, en 2005, lo hicieron Fernando González, quien llegó a cuartos de final, y Nicolás Massú, quien perdió en 2ª ronda. La ruta de los chilenos en la capital de Inglaterra continúa este miércoles para Tabilo, cuando a eso de las 6 de la mañana se mida contra el serbio Miomir Kecmanovic (30º).