La próxima compra de Sammis Reyes será un perro: “Mi novia, con quien vivo, me pidió que le diera uno, para que la acompañe ahora que pasaré más tiempo entrenando y viajando. Después voy a cambiarme a una casa un poco más grande, para que mi familia me visite, pero sigo siendo de la misma manera. Nada va a cambiar lo que soy”.

¿Y qué es Reyes? Desde este martes, oficialmente, es jugador profesional de fútbol americano en la NFL, la liga estadounidense de su deporte más popular y millonario. El Washington Football Team lo fichó como agente libre.

El primer chileno en lograr este hito repasa y agradece. “Tengo que mencionar a Steve Rifkind y su hijo Alex. Viví con ellos durante un año, me acogieron como familia y fueron quienes me dieron la idea de cambiarme del básquetbol al fútbol”, recuerda.

“Me gusta esta ciudad, viví acá, mi polola es de acá, tengo un círculo con el que disfruto. Esa gente se ha convertido en mi familia. Eso me convenció, además de la oportunidad de jugar en la NFL. El entrenador Ron Rivera me llevó a un tour por un centro de entrenamiento. Me hizo buenos comentarios y me dijo que espera mucho de mí, me dio buenos comentarios. Ha sido un hombre que ha pasado por cosas difíciles, que se recuperó de una dura enfermedad (cáncer) y sigue peleando realmente por lo que quiere, esto también me inspira a mí. Me dijo que confía en lo que estoy haciendo y que soy un prospecto para la siguiente temporada. Entro en un buen lugar”.

“Trabajar. Tengo un contrato de tres años que me garantiza todo lo que necesitaba y eso me tiene muy contento. ¿Ganarme un lugar? Mi contrato es para estar dentro de los 53 jugadores que están domingo a domingo. Ya tengo esa garantía”.

“Claro, tuvo un récord de 7 triunfos y 9 derrotas, la división Este no fue de las más fuertes en la temporada pasada. Por eso, siento que este año es para que podamos crecer y ser líderes, para sorprender en la NFL”.

Nacido en Talcahuano el 19 de octubre de 1995, Reyes se mudó a los tres años a Santiago. “Jugué por Boston College y la selección chilena. Me fui a los 14 años a Estados Unidos y hasta los 23 hice todo lo posible para llegar a la NBA. Ahora tengo la oportunidad de estar en una cancha de fútbol representando a Chile y a Latinoamérica”, dice el exbasquetbolista, hincha de Universidad de Chile “de toda la vida”.

“LeBron James siempre fue mi ídolo y lo es hasta hoy, es una persona a la que trato de seguir en lo que hace dentro y fuera de la cancha, él se preocupa de ayudar a otras personas. Por eso siempre digo que mi objetivo en esta vida es llegar a la cima y traer conmigo en ese camino a la mayor cantidad de gente posible, y no está hecho todavía. Quiero que otras personas puedan seguir estos pasos, que vean que cuando uno es esforzado se pueden conseguir cosas”.

“No ídolos, pero sí jugadores que trato de imitar. Tony González en el pasado, y ahora George Kittle y Travis Kelce, quienes son los mejores alas cerradas de la NFL. Trato de aprender de ellos”.

“Lo más parecido está en la habilidad para crear separación de un defensor, correr mi ruta y tratar de agarrar el balón con el fin de anotar un touchdown. Lo difícil es la terminología, entender el fútbol, porque no es un deporte bruto como piensan muchos, se requiere mucha técnica y aprender jugadas. Para ganar, hay que hacerlo con inteligencia”.

“Creo que las comparaciones son para los demás. No quiero decir algo y luego piensen que me creo el ídolo del mundo. Solo quiero decir que la vida es súper corta, hay poco tiempo para desarrollar nuestras carreras, sobre todo en el deporte. Entonces si alguien quiere ser el mejor de su barrio, su ciudad, su país, lo que sea, el único camino es ir paso a paso, peleando día a día, con los pies en la tierra”.