De cara al mercado que antecede la temporada 2023-2024 los nombres referenciales de la selección chilena asoman activos. Están en juego quizás los últimos contratos europeos de Alexis Sánchez y Claudio Bravo, emblemas de la “Generación Dorada”, un selecto grupo de jugadores de la Roja que sistemáticamente ha sido desalojado de las ligas top europeas.

Mientras el arquero es pieza basal para Manuel Pellegrini en el proyecto de Betis, el “Niño Maravilla” está cerrando una campaña reivindicadora en Olympique de Marsella, con un registro incuestionable en su primer año como jugador phoceen: 18 goles y tres asistencias en 42 jornadas. Pablo Longoria y Javier Ribalta, el binomio que gestiona la dirección deportiva del club, ya comenzó los acercamientos para renovar el vínculo del tocopillano.

“Marsella quiere quedarse con Sánchez, ha sido uno de los mejores jugadores esta temporada, pero el tercer puesto del Championnat es un problema para los dirigentes, porque la Champions League no está garantizada, el equipo tendrá que pasar las rondas de clasificación. Y es probable que Sánchez sea solicitado por otros clubes. Él ya es uno de los mejor pagados de la plantilla. En diciembre cumplirá 35 años, así que no creo que le ofrezcan mucho más en salario, tal vez bonos sí. La diferencia se puede hacer en el número de años de contrato”, reflexiona Baptiste Chaumier, cronista del diario L’Equipe.

El exariete internacional Luka Tudor calibra las opciones Sánchez: “Él ha demostrado ser un animal competitivo, un obsesionado por mejorar todos sus registros. Logró un renacer en Marsella, un club y una ciudad muy pasional, y Alexis necesita sentirse querido, valorado. Jugar en Francia es jodido, físicamente es durísimo, te mides ante la fortaleza de mucho africano-galo y con jugadores que tienen una preparación de base extraordinaria que ofrece la escuela francesa. Para él y la selección lo mejor sería su continuidad”.

Ben Brereton cerró su ciclo en el Blackburn (47 tantos en 177 juegos) y espera ser oficializado por Villarreal, uno de los pocos clubes que no exhiben déficit económico en sus balances, espoleado por una política de fichajes de manual. “El de Quique Setién es un equipo que apuesta mucho por la elaboración. Es de esperar que la temporada que viene la apuesta por el fútbol combinativo sea aún mayor y que el Villarreal siga compitiendo ante rivales como Real Sociedad o Betis por la última plaza de Champions. El estilo de su ataque tiene una mezcla, por un lado suele jugar Yéremy Pino, que es más de la escuela española, con mucho toque, y por el otro lado está Samuel Chukwueze, extremo nigeriano puro y duro que se luce en contraataques. Entiendo que Brereton llega para potenciar esta mezcla. Luego también en el centro hay jugadores de toque muy pausado como Dani Parejo y Giovani Lo Celso. Lo que es seguro es que no se va a volcar tanto el juego sobre su figura como en el Blackburn”, expone el periodista español Agustín Galán.

“El salto de calidad para Ben es importante. El Villarreal históricamente contrata bien, tiene una dirección deportiva al nivel de Monchi (director deportivo de Sevilla), no gasta tanto y acierta. Brereton no es dechado de virtudes, pero es por sobre todo un buen jugador de fútbol, inteligente, sabe jugar en equipo, cuándo apoyarse, cuándo ir al espacio, además exhibe mucha fuerza mental. Para un jugador chileno, más siendo atacante, ir a un cuadro que juega copas europeas es significativo; hay que ser fríos y el panorama de los referentes chilenos en la selección cambió, debemos ser realistas”, asume Tudor.

La Serie A está cerca de quedarse sin representantes chilenos porque el vínculo de Gary Medel y Bologna expira el 30 de junio. El “Pitbull”, considerado como volante por el técnico Thiago Motta, perdió terreno: su última titularidad fue el 9 de enero y a partir de ahí apenas sumó 125’ en la escuadra rossoblú. En la posición los titulares son el neerlandés Jerdy Schouten (26) y el argentino Nicolás Domínguez (24), y tras ellos el club espolea la consolidación del croata Nikola Moro (25) y Niklas Pyyhtia (19). Por ello, Giovanni Sartori y Marco di Vaio, operadores del mercado del club, no contemplarían extender el ciclo del chileno (lleva cuatro temporadas), que tendría ofertas de clubes qataríes, según la prensa italiana.

Charles Aránguiz, Erick Pulgar, Mauricio Isla y Arturo Vidal ya asumieron el adiós europeo. El contrato del “King” con Flamengo, que se extiende hasta diciembre, podría terminar un semestre antes según el medio Globo Esporte, porque el 3 de julio se abre el libro de fichajes en el Brasileirao. La torcida rubro-negra ya lo apuntó por bajo rendimiento y su salario, que supera el millón de reales por mes, aliviaría la tesorería para fichar a cuatro refuerzos, además de los ya seguros Agustín Rossi (arquero) y Luiz Araujo (extremo). Un pretendido es Allan, medio de Atlético Mineiro que ya dirigió Jorge Sampaoli en el “Galo”. Tras jugar ante Ñublense en la Copa Libertadores, Vidal fue reprendido el jueves pasado por un hincha solitario al llegar al aeropuerto de Río de Janeiro. “Vuelve a Chile por el amor de Dios”, le enrostró el fanático.