No hay mejor rival para Universidad de Chile que Unión Española, oponente perfecto para sacudirse de todos sus males. Así como Colo Colo se ha convertido en un escollo insalvable para los azules, los universitarios son lo mismo para los hispanos en el último tiempo y ayer no fue la excepción. En Valparaíso la U sumó su primera victoria en la era de Mauricio Pellegrino y lo hizo con un solitario gol de Cristián Palacios, en un encuentro trabado, peleado, con aciertos y fallas evidentes.

En los primeros tres minutos la U explotó las regalías infantiles que daba el sector derecho de Unión Española. En esos 180 segundos, y por jugadas que arrancaron por ese boquerón, Leandro Fernández estuvo cerca de abrir la cuenta, lo que también pudo hacer Israel Poblete, quien apuró un balón en plena área chica que se fue cerca de un palo, luego de aprovechar las vacilaciones de Manuel Fernández y Sebastián Pérez.

En el arranque, y hasta los 20 minutos del primer tiempo, el equipo azul se vio mejor. Presionaba en campo contrario y cuando recuperaba la pelota salía rápido, explotando los costados y los forados que los hispanos dejaban a sus espaldas. Y es que los rojos buscaban ser un cuadro corto, tratando de posicionar a sus jugadores en el campo rival, pero cuando perdían la pelota las coberturas fallaban, debiendo Sebastián Pérez salir varias veces a reventar como último hombre. En el área de Cristóbal Campos, en tanto, un cabezazo de Bryan Carvallo a los 24’, que se paseó por el área, y un remate de Luis Pavez (43’) condimentaban un partido que se emparejaba.

Sin embargo, al filo de la primera etapa una pelota que tenía Unión en campo rival fue recuperada por Renato Huerta. Y lo dicho: la U salió rápido con tres toques, mientras Unión volvía a correr hacia su arco fallando en las coberturas. Ahí, un pase en profundidad de Poblete culminó con Cristián Palacios superando una nueva salida del meta hispano para anotar el único gol del partido, lo que además se propició por la impericia de Simón Ramírez, quien se quedó enganchado, habilitando al uruguayo.

En la segunda parte el partido mutó. Unión hizo dos cambios y empezó a controlar el juego en el sector medio. Benjamín Galdames, primero, y luego Sebastián Leyton exigieron a Campos, mientras Huerta respondía con un remate bajo que Pérez sacó con la punta de los dedos. Un cabezazo que pasó cerca de un vertical hispano y el despilfarro habitual del limitado Leandro Garate cerraron un encuentro que permitió ver cierta mejora en el cuadro azul, pero que sigue mostrando que no le sobra nada.

Ayer terminó aguantando el 1-0 ante un rival limitadísimo— que debe estar muy preocupado por ser colista y su falta de variantes—, y ante cuadros de mayor envergadura, seguramente lo pasará mal. Pero en Playa Ancha lo que menos importaba a los hinchas y dirigentes era que su equipo luciera. Los puntos eran clave y los consiguieron.

La victoria trajo alivio en la U. “Tuvimos un arranque muy bueno. En los primeros 20 minutos mostramos mucha dinámica y el rival se sintió asfixiado. Tuvimos dos o tres situaciones y después vino el gol. Con eso nos alcanzó para ganar el partido. En el segundo tiempo ellos se vinieron encima y en esa etapa jugamos muy apresurados. Como al principio tuvimos esa frescura, con salidas rápidas, quisimos hacer todo el tiempo lo mismo y nos costó mucho asegurar la pelota después de recuperarla. En eso tenemos que tener más calma, pero el equipo compite bien y tiene hambre de mejorar. Siento que dimos un paso adelante”, analizó el entrenador Mauricio Pellegrino.

Renato Huerta, uno de los buenos valores azules, aseveró que “así es como jugamos nosotros, la vez pasada la cancha no estaba en condiciones para hacer nuestro fútbol. La idea era presionar arriba como se vio en los primeros 20 minutos y creo que lo hicimos de buena forma. Tengo 18 años y desde los diez estoy en el club, esto es hermoso, un sueño”.

Por su parte, Ronald Fuentes advirtió: “Les dije a los jugadores que no podemos seguir regalando los primeros tiempos como lo hicimos ante la U y también ante Ñublense, la semana pasada. Vamos en la segunda fecha y no hay que dramatizar, pero si preocuparse”.