“¿Cómo está? Tanto tiempo. ¿Ya estamos listos? Ok, empecemos, porque hay que seguir trabajando”. Así comienza Martín Lasarte el diálogo con “El Mercurio” vía teleconferencia. El DT se encuentra en su natal Montevideo, preparando los partidos ante Paraguay y Ecuador, en marzo, luego de un rápido arribo a la selección chilena.

“Lo de arreglar el contrato no tomó mucho tiempo, fueron dos o tres días, más o menos. Cuando uno habla de arreglar el contrato parece que solamente fuese la firma o ponerse de acuerdo en algunas situaciones. Acá, yo me refiero al conocimiento, hablar de cosas, profundizar y eso llevó tres o cuatro días. En esa charla quedó explícito que hay dos objetivos primordiales: uno es clasificar al Mundial y el otro, que viene de la mano, se refiere a una regeneración en el tiempo. Trataremos de aportar también en ese aspecto. Cuando uno ocupa la palabra recambio se entiende que se saca a una pieza y se pone otra. Yo hablo de regeneración, que significa que ambos (experimentados y nuevos) convivan en determinados períodos de tiempo. Incluso, posmundial. Esa es mi apuesta”.

“A mí no, no me importa. Llegué a la U no siendo el uno, lo tengo claro. La primera vez que dirigí Nacional tampoco era el uno. Definieron ir por otro entrenador y terminé siendo yo el elegido. Es como cuando uno ve jugadores. Está la opción A y no la puedes traer, porque es cara o por otros motivos y se tienen que ver otras alternativas. A mí no me da pudor eso, no me complica”.

“No sabía que estaban enterados de eso. La verdad es que fui a Chile por una situación de salud personal y estaba allá (en Santiago). Por eso en ningún momento se me pasó por la cabeza esto, más allá de que en alguna oportunidad, en otros procesos, algunos me decían que estaba en una lista de cinco o de diez. Esta vez, alguien me comentó que había una lista flotante y que estaba, pero no sé en qué lugar aparecía yo. Se fueron dando una serie de acontecimientos que derivaron en esta preciosa posibilidad”.

“Hay que entender que, si bien lo de uno puede ser bueno o muy bueno, lo del rival, a veces, puede ser más. Las eliminatorias son durísimas, clasifica un número fijo de selecciones y eso hay que incorporarlo y saber llevarlo. Desde mi humilde opinión, este grupo, los jugadores que llevan más tiempo y que han conseguido cosas muy importantes para Chile, más una cantidad de jugadores jóvenes, están en condiciones de pelear la clasificación. Realmente lo siento y lo pienso. Hace falta tener la fortuna de que todos estén acondicionados, que jueguen más a menudo en sus clubes, que estén sanos, sin lesiones. Creo que está la posibilidad cierta de clasificar, de lo contrario no hubiese tomado este desafío”.

“No creo que solo sea un tema de gusto, las eliminatorias son un poco crueles. Quizás un campeonato local donde hay una serie de partidos, 34 ó 38, uno puede ver el recorrido de cada equipo, ver qué hace o no para conseguir un resultado, pero en las eliminatorias es distinto. Hay poco tiempo para trabajar, los jugadores llegan muy encima de los partidos, con todas sus cargas. Entonces a veces es difícil que en corto tiempo los equipos ejerzan o funcionen al ciento por ciento”.

“Una cosa es el resultado y otra la forma. Creo que Chile debería tener algún punto más por lo que hizo. Con Uruguay, por ejemplo, no debió perder por ningún lado. La cantidad de puntos obtenidos no refleja lo que Chile hizo en el campo de juego. Si me gustó más o menos lo que mostró, a mí no me gusta opinar de colegas. A nivel de resultados sí creo que Chile debería tener más puntos”.

“No me parece ético hablar de un colega. Sí puedo hablar de lo que voy a tratar de que ocurra, sabiendo que esto a veces a la gente no le gusta, pero es como uno le ve, pues yo no quiero engañar a nadie. Me gustan los equipos equilibrados, que defiendan y ataquen bien. Ensanchar la cancha cuando se tiene el balón, atacar por fuera. Que sea un equipo que tenga alternancia: que ataque por un lado, por el otro, por dentro y por fuera, que juegue combinado. Que en algún momento presione alto, que sea intenso arriba para robar balones y en otros momentos, si el resultado no nos está favoreciendo, retraernos un poco para que el rival nos dé espacios, también darle importancia al balón parado. Es muy simple como veo el fútbol. No me gusta llenar con conceptos que después no se ven”.

“Los entrenadores son como son. Las copias son malas. Quiero creer que si hablaron conmigo fue porque yo trabajé en Chile, no vengo del desierto del Sahara. Y porque me fue bastante bien. Con Universidad Católica no fui campeón, pero se jugaba muy bien, llegamos a semifinales de la Copa Sudamericana. Con la U fui campeón. Quiero creer que me contrataron por lo que he hecho, por mi forma de ser y no para intentar ser la copia de otro colega, a los cuales admiro, pero yo tengo mi propia forma y manera y desde ahí trabajo. Esto no significa que uno en el recorrido vaya incorporando cosas. Cuando empecé dirigí en Uruguay a un equipo que se iba al descenso, que estuvo nueve partidos sin recibir goles. Era un equipo defensivamente muy bueno y contragolpeaba muy bien. Desde ese momento, yo he cambiado mucho como entrenador, así tiene que ser”.

“Cuando uno no empieza de cero, lo más atinado es basarte en lo que ya está, en la última foto, en la última nominación, en los equipos utilizados. Me nombras a Bravo, Isla, Medel, Aránguiz, Vidal, Sánchez, Vargas y creo que ellos y muchos jugadores de la generación dorada tienen todavía mucho para dar y como son jugadores que han vivido el éxito y también lo contrario, me parecen fundamentales. No me parece que sea el momento para no contar con ellos, al contrario”.

“Es una ventaja. Es un jugador muy seductor por sus condiciones y características, puede ser utilizarlo en cualquiera de los dos posiciones. Es incisivo, agresivo, ganador en el mano a mano, muy completo”.

“Yo considero a todos los que estén aptos, no hay jugador fuera por adelantado. Es un momento en el que todos debemos tirar para el mismo lado”.

“Todos están considerados, no elimino a nadie, pero bueno, cada uno tiene derecho a decidir”.

“La mejor respuesta fue la última jornada eliminatoria. Ambos mostraron un nivel altísimo, un profesionalismo y un cariño total por los colores. Eso es lo importante. Me tocó vivir este tipo de casos antes. En este caso lo que importa y se impone es el cariño que ambos demuestran por Chile”.

“No vamos a dejar a nadie afuera. Estamos hablando de un jugador que está compitiendo. No quiero hablar de uno para no pasar a llevar a otros, pero tendrán chances todos quienes tengan un buen presente, de acuerdo a lo que necesitemos. Vi su accionar (de Suazo) y harto fútbol chileno. Tengo claro lo que se dio en el reciente torneo”.

“Veo jugadores que están asomando, pero no todavía para jugar en la selección, porque estamos hablando de alguien que va a comandar el ataque de la selección. No podría decir que tengo a uno identificado, tengo algunas ideas para probar (jugadores) y ver si logramos resultados positivos”.

“Estamos recabando información. No tengo información de alguno nuevo, pero la idea es intentar rastrear y buscar todas las posibilidades. No vamos a dejar a nadie afuera. Luego iremos filtrando lo que necesitemos para cada partido y de acuerdo al momento que estén viviendo. Es muy bueno que alguno tenga el deseo de ponerse esta camiseta, que tenga el pasaporte, pero hay que ser cuidadoso. Hay que considerar todo el espectro, a jugadores del medio local e internacional. Incluso ver jugadores que quizás no han participado mucho en la selección, pero que pueden ayudar en momentos o partidos determinados. Estamos en eso, filtrando todas estas variables. No quiero hablar de nombres propios. Sí te digo que vamos a valorar a todos, en la medida que un jugador nos parezca apto, necesario. Vamos a utilizar a todos”.

“Fui jugador y sé que cuando uno como técnico da algún nombre, otros se sienten. Sí creo que hay jugadores jóvenes en distintos puestos que nos pueden ayudar a esa regeneración”.

Lasarte no elude el tema, aunque aclara que “es un resorte que no manejo yo, es de cada dirigencia que ha estado al frente. He trabajado en Chile y sé que hay buenos técnicos, muy capaces, siempre lo he dicho. Ahora se me presentó a mí esta posibilidad y yo me siento identificado (con Chile) y muy contento”

“Sí, sumaremos profesionales chilenos a nuestro staff. Tenemos la idea de incorporar a gente con sentido de pertenencia, creo que tiene que ser así. Eso lo estamos viendo”.

“No tomé la U porque esa opción, en ese momento, estuvo emparentada con este tema de mi salud”.

“No sé si estoy errado o no, pero sentí que en este último torneo el nivel subía, luego bajaba y subía nuevamente. La realidad es que la pandemia cambió todo: la forma de entrenar, el calendario, en fin. Vi un torneo apasionante. La UC parecía que ganaba fácil el título, Colo Colo se vio comprometido con el descenso, la U también en algún momento… Fue un campeonato emocionante, interesante y muy competitivo. Le mando un saludo a la U. de Concepción, ojalá vuelva rápidamente a Primera”.