Martín Vidaurre confirmó que es un nombre a considerar para los próximos ciclos olímpicos en el ciclismo de montaña. En su debut en las citas de los anillos, el pedalero nacional finalizó 16º en la prueba masculina de Tokio y se entreveró entre los mejores de su clase, pese a dar la ventaja de su juventud.

De los 38 competidores, Vidaurre era el segundo más joven de la grilla, con 21 años y 158 días, superando solo al namibio Alex Miller, que tiene 20 años. El nacional, que clasificó a Tokio en el campeonato mundial sub 23 de 2019, dio probadas muestras de su calidad cuando fue capaz de remontar desde su trigésimo puesto en la partida hasta meterse en la mitad superior del grupo, coqueteando con el top 15 a ratos.

El circuito de mountain bike de Izu, distante a unos 120 kilómetros de Tokio, no fue fácil para los pedaleros. El neerlandés Mathieu van der Poel debió abandonar por los dolores de una tempranera caída, mientras que el checo Ondrej Cink dijo adiós por la rotura de su bicicleta. En esas circunstancias, Vidaurre se sobrepuso, se metió en la pelea de un pelotón secundario y buscó remontar posiciones en la vanguardia.

Estuvo difícil. Desde un primer momento los suizos Mathias Flueckiger y Nino Schurter, así como el británico Thomas Pidcock se escaparon de los demás e impusieron un ritmo inicial que costó seguir, pero que se recortó a medida que avanzaban. Mientras, Vidaurre lidiaba un poco atrás y se mantenía a la expectativa, consolidándose entre los 20 primeros.

Finalmente, el chileno cruzó la meta con un tiempo de 1.28:33 y quedó a 3:19 de Pidcock, que se colgó el oro. Flueckiger fue plata a 20 segundos, mientras que el bronce se lo llevó el español David Valero, a 34 segundos.

Vidaurre, además, fue el segundo mejor latinoamericano, detrás del brasileño Henrique Avancini, de 32 años y 3º del ranking UCI. ¿La distancia? Apenas 24 segundos entre ellos.

Vidaurre pasó la meta feliz, con brazos en alto y sabiendo que había cumplido una actuación impecable en lo personal y que, además, mejora la breve historia del mountain bike olímpico chileno, que tenía a Cristóbal Silva con dos participaciones: 40º en 2004 y 36º en 2008.

No logró medalla ni diploma, pero Vidaurre sí pudo conseguir algo más en Tokio, la confirmación como carta importante para Santiago 2023 y las próximas citas olímpicas.