El Mercurio.com - Blogs : Niebla e incertidumbre
Día a día
Viernes 09 de junio de 2023
Niebla e incertidumbre
Hay mañanas en las que la niebla se agolpa sobre las calles y encubre con un gris misterioso la caminata por el barrio. Su espesor —sea hondo o más ligero, neblina en este último caso— atenúa la contemplación de lo que se tiene delante y, por decirlo así, hace más incierto el mismo tránsito habitual y cotidiano, en que se reiteran tanto la ruta como lo observado. Sin embargo, al momento de posarse la niebla, la andanza matutina se asemeja más a la vida, en tanto ella está siempre revestida de algo eventual, ya que nadie puede en propiedad aventurar de modo indubitable sobre su propio futuro. De allí que la niebla nos ensimisma y nos despierta interrogantes en torno a lo que viene peatonalmente, tal como la existencia nos asombra y nos vuelca hacia la pregunta y la inevitable ignorancia respecto de cómo ha de continuar la propia biografía.
En consecuencia, entre niebla e incerteza hay un matiz de relación, como si ambas fuesen parientes lejanos, pero no por ello sin un lazo común. El velo de la bruma es parecido al enigma frente al mañana de cada uno. De hecho, deambulamos año a año aparejados por la duda acerca de lo que viene, tal como el viandante en medio de la niebla tantea la próxima pisada con cierta inevitable vacilación, aunque también con esperanza.