Luego de algunas semanas en que el ritmo de vacunación contra el covid-19 disminuyó de forma significativa, principalmente por la falta de dosis de Pfizer para inmunizar a los menores de 18 años, el programa ha recuperado el tranco y solo en los últimos dos días se ha inoculado a más de 200 mil rezagados.
De esta forma, más del 65% de la población de Chile ya cuenta con esquema completo de protección contra el coronavirus, siendo uno de los países con mayor avance a nivel mundial.
Pero la vacunación está lejos de terminar y ya se avizora el comienzo de la colocación de dosis de refuerzo.
Los resultados del estudio que realiza el Ministerio de Salud que fueron presentados el martes, que muestran una menor efectividad para reducir los contagios sintomáticos, fundamentalmente de la CoronaVac (Sinovac), parecen haber despejado las pocas dudas que quedaban respecto de la necesidad de aplicar una inyección complementaria.
Ayer, el ministro de Salud, Enrique Paris, afirmó que “se confirma que vamos a comenzar un programa de dosis de refuerzo, no la quisiera llamar tercera dosis. Quiero insistir en que ojalá utilicemos ese lenguaje”.
El secretario de Estado sostuvo que durante la tarde mantendría una reunión con el Presidente Sebastián Piñera y un grupo de expertos, para definir claramente en qué momento iniciar la aplicación.
Sobre qué grupos podrían ser los primeros en recibir el refuerzo de inmunización, Paris asegura que “hay personas que por razones fisiológicas, o de enfermedad, comienzan a mostrar una caída en su respuesta inmunitaria y ellas van a ser las primeras que van a recibir esta dosis que hemos llamado de refuerzo”.
Además, el ministro afirma que aún se están esperando los resultados del estudio clínico que lleva el Minsal en el Hospital de Urgencia Asistencia Pública, para saber qué fórmulas se utilizarán para la dosis de refuerzo, aunque remarca que “todas las vacunas que tenemos actualmente en Chile, respetando obviamente las edades y las indicaciones que tiene cada una, van a ser útiles”.
Jaime Burrows, exsubsecretario de Salud Pública (2014-2018), destaca que el reforzamiento de la vacunación es una “buena noticia”, aunque acota que, “en la medida que se puedan usar vacunas que disminuyan más la circulación viral (como Pfizer), es mucho mejor, porque mientras circula el virus existen probabilidades de que vuelva a mutar, porque se está replicando y puede haber pequeños cambios que le generen ventajas y hacerlo más virulento. Entonces, es importante que vayamos transitando y eligiendo las vacunas con más efectividad que estén disponibles para los recursos que tenemos”.
Inmunizados contagiados
Si bien el plan de inmunización ha avanzado de tal manera en Chile que ha permitido vacunar a más del 60% de toda la población, lo que ha facilitado una mejoría de la situación epidemiológica, queda patente que estar vacunado no es sinónimo de que todos los riesgos asociados al covid-19 han desaparecido. Esto, sobre todo considerando que más del 75% de los inoculados han recibido dosis de la vacuna de Sinovac, que si bien alcanza una alta efectividad para evitar hospitalizaciones y muertes, ha mostrado una efectividad menor para prevenir contagios (58%, según la última actualización).
Es así que los vacunados también pueden transformarse en vectores de contagios y expandir el virus, sobre todo ahora que en el país ya se confirmaron los primeros contagios de variante Delta por transmisión comunitaria. Así, este virus más contagioso ya circula libremente por el país y según los expertos, es cosa de tiempo para que se transforme en la variante predominante. De hecho, según datos del Ministerio de Salud, cerca del 50% de los nuevos contagios ocurre en personas que están vacunadas.
El epidemiólogo Rafael Araos, asesor de la cartera, asegura que el porcentaje de casos que se infectan estando vacunados, “por ahora, está alrededor del 50%, es decir, todavía tenemos números relevantes de casos que ocurren en población no vacunada, pese a que esa población es menor. Ahora, cuando uno mira los porcentajes de la gente que se hospitaliza o fallece, sigue siendo significativamente menor en el grupo vacunado que en el de no vacunados”.
Según el especialista, “los porcentajes de casos que ocurren en vacunados, o breakthrough, como se dice en inglés a la ocurrencia de una infección por SARS-CoV-2 en una persona que recibió su esquema completo de vacunas, es un porcentaje que va creciendo naturalmente en la medida que la población se vacuna. Así, por ejemplo, cuando tengamos el 100% de la población vacunada, el 100% de los casos va a ser breakthrough”.
MASIVO
A la fecha, en Chile se han colocado más de
25 millones de vacunas contra el covid-19.