Señor Director:

Ignacio Walker continúa evadiendo el punto de fondo: ¿Por qué si, como él mismo reconoce, el comunismo y el nazismo son doctrinas totalitarias de igual naturaleza, la DC chilena ha pactado sistemáticamente con el Partido Comunista abriéndole las puertas para que este avance su causa antidemocrática y antiliberal en nuestro país?

Hasta ahora la única explicación coherente parece ser la de Farías. Walker la pretende descalificar con citas que el mismo Farías rescata y que solo confirman la ambigüedad de la DC respecto del fascismo —y del marxismo—. De ahí que Farías hable de la DC como un “camaleón” que muta acercándose y alejándose de estas doctrinas, pero que jamás tiene una postura categórica y consecuente en su contra debido a que comparte con ellas un “socialismo genérico”, antiindividualista y anticapitalista.

En cuanto a los furibundos escritos antisemitas de Allende y Frei Montalva, estos son demasiado evidentes como para que Walker intente desconocerlos recurriendo a la simplona caricatura de que Farías buscaba nazis “hasta debajo de las piedras”.

De más está decir que estos escritos, como los múltiples elogios de diversos falangistas a Maurras, Mussolini y Hitler, todos documentados en el libro de Farías, se oponen radicalmente al “humanismo integral” de Jacques Maritain.

Axel Kaiser