Señor Director:

Un estímulo positivo es escuchar la racionalidad calma y fundamentada del señor presidente del Banco Central en su preclara y fundamentada exposición de IPoM. Ojalá nuestro gremio profesional imitase su manera de exponer bajo espíritu sereno.

A una exposición que no requiere de comentario mayor, solamente deseo enunciar una específica preocupación a corto y mediano plazo. Apoyándome en sus cifras y algunas otras, me nace una preocupación particular sobre la evolución del empleo y mercado laboral.

Mientras nuestra economía e institucionalidad pública han demostrado flexibilidad, resiliencia y capacidad de reacción, son los sectores más intensivos en trabajo —como comercio, servicios generales, construcción habitacional y servicios personales— los que nuevamente serán impactados con mucha fuerza este segundo trimestre 2021 que se augura más complejo.

El recrudecimiento de la pandemia bajo nueva ola, la dureza de una cuarentena necesaria pero severa y más estricta, y el rezago en la normalización de la demanda por consumo, llevarán a un estrés aditivo al estresado nivel de empleos en ciudades y en regiones.

Harán bien el Banco Central, los equipos de Hacienda, Economía y Trabajo, amén de directivas gremiales del sector productivo general, en enfocarse con especial atención en apoyos innovativos y focalizados en esos empleos, ya que detrás del problema económico aludido surgen aspectos humanos y sociales de mucho peso.

Eduardo Aninat Ureta
Exministro de Hacienda