Mark Zuckerberg, jefe ejecutivo de Facebook Inc., se ha quejado durante años que Apple Inc. y su líder, Tim Cook, tienen demasiado dominio sobre el negocio de la gran empresa de redes sociales. En 2018, su ira se desbordó.
Facebook se vio envuelto en una controversia por sus prácticas de recolección de datos. Cook intensificó las cosas en una entrevista en televisión nacional, donde dijo que su propia compañía jamás se había encontrado en ese tipo de lío. Zuckerberg respondió que los comentarios de Cook eran “extremadamente simplistas” y “no se apegaban para nada a la verdad”.
En privado, Zuckerberg fue incluso más severo. “Tenemos que causar dolor”, le manifestó a su equipo, por tratar tan mal a la compañía, según personas al tanto del intercambio.
No fue la primera vez —o la última— que los comentarios y acciones de Cook dejaban a Zuckerberg sumido en la furia y, a veces, tramando desquitarse de Apple. La intensificación de las quejas estalló a fines del mes pasado en un raro ojo por ojo público entre las dos grandes tecnológicas que dejó al descubierto la latente animosidad entre sus líderes, quienes intercambiaron estocadas sobre la privacidad, los instrumentos de seguimiento de aplicaciones y, por último, sus visiones opuestas sobre el futuro de internet.
Apple se ha posicionado como la protectora de la privacidad digital, al defender un bien mayor, mientras a menudo lanza críticas al modelo de negocios de Facebook; sin nombrar a la compañía. Todo eso irrita a esta última, la que considera que Apple se extralimita en una forma que amenaza la existencia de Facebook, y que es hipócrita, puesto que entre otras cosas realiza extensos negocios en China donde la privacidad es escasa. Un intento en 2017 por abordar las tensiones a través de una reunión frente a frente entre los dos líderes resultó en un tenso punto muerto.
El detonante el mes pasado fue un nuevo instrumento de privacidad que el fabricante del iPhone planea desplegar y que restringirá más la capacidad de Facebook para recolectar datos. Zuckerberg acusó a Apple en una videollamada sobre ganancias de utilizar su plataforma para interferir en el modo en que funcionan las aplicaciones de Facebook. Cook, sin nombrar a esta última, dio un discurso en línea en el que condena “las teorías conspirativas que son alentadas por algoritmos”; un golpe que se produjo días después de los disturbios en el Capitolio.
En juego está el modo en que evolucionará internet y qué compañías lo dominarán. Las visiones de Facebook y Apple son divergentes y cada vez más incompatibles. La primera quiere capturar y obtener beneficios económicos de aquellos ojos puestos sobre cada dispositivo y plataforma posible. La segunda quiere atraer a los usuarios a su propio universo orientado al hardware, en parte a través de comercializarse ella misma como una compañía enfocada en la privacidad. El resultado de la batalla podría afectar qué tipo de información ven los usuarios cuando navegan por internet.
La guerra de palabras e ideas finalmente se desarrollará en la corte, en las entidades reguladoras y en las decisiones de los usuarios cuando ambas compañías se defiendan contra las investigaciones antimonopolio. Es probable que las potenciales soluciones de regulación y las decisiones legales afecten a cientos de millones de teléfonos de los consumidores en los próximos años.
Una vocera de Facebook, Dani Lever, dijo que la elección entre servicios personalizados y privacidad era una “falsa solución de compromiso”, y que Facebook proporciona ambas cosas. “Esto no se trata de dos compañías. Se trata del futuro del internet libre”, señaló, y agregó que las pequeñas empresas, los creadores de aplicaciones y los consumidores salen perdiendo con las nuevas normas de Apple. “Esta sostiene que esto se trata de privacidad, pero en realidad se trata de ganancias, y nos unimos con otros para señalar su comportamiento anticompetitivo”.
La vocera negó que la disputa entre las dos compañías sea personal, y observó que Facebook está “haciendo frente a Apple deliberadamente” en nombre de las empresas y creadores que han sido perjudicados por la nueva política.
Un vocero de Apple declinó responder a los comentarios de Lever.
El senador Mike Lee, de Utah, importante miembro republicano del subcomité antimonopolio del Senado, manifestó: “Este conflicto se encuentra en el nexo de privacidad y antimonopolio. No queremos imponer una regulación que simplemente termine protegiendo a los titulares y afianzando los monopolios. Facebook sigue expresando su apoyo a la ‘regulación de internet', y no es porque quiera ayudar a la competencia”.
Asesores de ambas compañías, entre ellos bufetes y grupos de presión, están cada vez más preocupados de que no podrán trabajar para ambas empresas tecnológicas, según personas que trabajan para las firmas.
En términos de personalidad, ambos hombres difieren enormemente. Zuckerberg, de 36 años, es un hacker que abandonó Harvard y quien una vez promocionó el fin de la privacidad como una norma social. Cook, de 60 años, oriundo de Alabama, ha sido un hombre profundamente reservado que ascendió en la compañía como experto en logística de la cadena de abastecimiento.
Zuckerberg construyó Facebook en base al concepto de apertura radical, y está decidido a mantener la compañía en el centro de la conectividad global, con servicios gratuitos apoyados por la publicidad con orientación específica. Algunas personas que conocen la forma de pensar de Zuckerberg dijeron que ha tomado las andanadas de Apple a modo personal, corriendo el riesgo de que eso lo distraiga en un momento en que la empresa está librando varias otras batallas en EE.UU. y el extranjero por temas de antimonopolio y moderación de contenido.
Cook, exasistente del cofundador de Apple Steve Jobs, planea lograr que los usuarios tengan una experiencia libre de lo que él describe como un rastreo invasivo. Su posición sobre la privacidad, la que se remonta a los días del fallecido Jobs, se facilita un poco más debido a que el negocio de Apple proviene de la venta de iPhones, iPads y computadoras, no avisos.
A medida que Apple y Facebook han evolucionado, compiten cada vez más frente a frente en algunas áreas. Ante la posibilidad de que las ventas del iPhone lleguen a un nivel máximo, Cook ha impulsado a Apple para que refuerce y desarrolle servicios digitales. Su sistema de chat iMessage compite por la atención de los usuarios con las ofertas de Facebook tal como WhatsApp. Facebook está desarrollando más dispositivos de hardware. Ambas empresas están invirtiendo en sistemas de pago.
Apple también recibe miles de millones de dólares al año de Google de Alphabet Inc., por hacer que esta sea el motor de búsqueda predeterminado en el navegador Safari de Apple. Las ganancias de Google derivan en gran medida del tipo de recopilación de datos sobre los usuarios que Cook y otros líderes de Apple han criticado severamente a Facebook.
En forma pública, Zuckerberg ha identificado a Apple como una de las competidoras más temibles de Facebook. En privado, él y otros empleados de la compañía han estado realizando una campaña contra Apple, afirmando en reuniones y comunicaciones con personeros de gobierno, autoridades antimonopolio y avisadores que la compañía está abusando de su poder y merece una mayor inspección reguladora, según personas al tanto del tema.
En una videollamada sobre ganancias a fines de enero, Zuckerberg manifestó: “Apple tiene todos los incentivos para utilizar su posición como plataforma dominante para interferir en el modo en que funcionan nuestras como también otras aplicaciones”.
Apple ha aumentado sus controles de privacidad, en preparación para desplegar una nueva función el segundo trimestre de este año que permitirá que los usuarios limiten la capacidad de las aplicaciones para rastrear lo que están haciendo en sus teléfonos.
A fines del mes pasado, en su discurso en línea en el Día Internacional de la Privacidad, Cook dejó en claro su punto de vista, sin nombrar a Facebook. “Si se construye una empresa en base al engaño de los usuarios, al aprovechamiento de datos, a elecciones que no son elecciones en absoluto, entonces no merece nuestro elogio; merece una reforma”, expresó.
Las relaciones no fueron siempre tan tensas. En 2014, cuando Cook parecía más concentrado en la amenaza a la empresa que presentaba el sistema de operaciones Android de Google, el ejecutivo consideraba a Facebook como un “socio”.
El surgimiento del teléfono inteligente, impulsado en gran parte por el iPhone de Apple, llevó a Facebook en 2012 al mundo de las aplicaciones móviles. A medida que aumentaba el uso de aplicaciones, aparecían nuevas interrogantes sobre la privacidad del usuario. Ya en ese entonces, Apple estaba trabajando en el tema internamente.
Antes de su muerte en 2011, Jobs había hablado públicamente sobre el tema en una reunión que organizó The Wall Street Journal. “Creo que las personas son inteligentes, y algunas quieren compartir más datos que otras”, señaló. “Pregúntenles. Pregúntenles cada vez. Hagan que les digan que no quieren que les pregunten más si están cansadas de que les pregunten. Infórmenles con exactitud qué van a hacer con sus datos”.
Apple posteriormente desplegó funciones y software destinados a hacer que las funciones de privacidad fueran más fáciles de utilizar y más seguras. Presentó el escáner de huellas Touch ID en 2013 y un nuevo software en 2014 que encriptaba las fotos, mensajes y otros datos de los usuarios en una forma en que la compañía ya no podía extraer más la información de un teléfono bloqueado.
El tema atrajo la atención pública después que Edward Snowden filtró secretos que expusieron los programas de recolección de datos del gobierno estadounidense y Apple luchó con los investigadores federales que buscaban datos del iPhone de un hombre armado que dio muerte a 14 personas en una masacre en San Bernardino, California. Apple se negó a permitirle al gobierno un método para evitar la contraseña del teléfono, aunque el tema se enfrió cuando el FBI encontró un instrumento de un tercero para hackear el teléfono.
En público, Cook ponía énfasis en que el negocio de Apple no se basaba en la recopilación de información del usuario, e instaba a los usuarios a “seguir el dinero” para ver si las compañías se estaban beneficiando con la recolección de datos personales.
Esos comentarios irritaban a Zuckerberg y a otros ejecutivos de Facebook, quienes se erizaban ante la idea de que la publicidad estuviera en discordancia con los clientes y públicamente cuestionaban lo que consideraban como altos precios de los productos de Apple, contaron personas que trabajaban con ellos. Algunos empleados creían que era hipócrita por parte de Apple adoptar una imagen pública como una empresa consciente de la privacidad cuando hacía extensos negocios en China, dijeron algunas de las personas.
Ejecutivos de Facebook estaban molestos con el ritmo con el que Apple aprobaba las actualizaciones de sus aplicaciones. Zuckerberg se quejaba que Cook podría estar interviniendo personalmente para retardar las cosas, de acuerdo a personas al tanto de las discusiones.
En diversos momentos, Zuckerberg propuso a sus asistentes, a veces por correo electrónico, que Facebook postergara el lanzamiento de nuevos productos en dispositivos Apple y en cambio diera al sistema de operaciones Android de la competencia una ventana exclusiva, según personas al tanto del tema. Facebook no hizo eso.
En 2017, durante la reunión anual de ejecutivos de tecnología y medios de comunicación en Sun Valley, Idaho, Zuckerberg tuvo una reunión con Cook para enfrentar las crecientes tensiones.
La reunión no anduvo bien. Zuckerberg le reprochó a Cook por los retrasos en la revisión de aplicaciones y otros problemas entre las dos compañías. Cook se mostró no dispuesto a ceder terreno, y Zuckerberg sintió que su contraparte fue agresivo, de acuerdo a personas al tanto de la conversación.
A principios de 2018, Facebook reveló que Cambridge Analytica, una firma que contribuyó a la campaña presidencial de Donald Trump, había utilizado indebidamente los datos de la plataforma de redes sociales, lo que amplificó los antiguos temores sobre la enorme cantidad de información que recopila de los usuarios.
Cuando fue consultado en MSNBC qué haría si fuera el jefe ejecutivo de Facebook, Cook respondió: “Yo no estaría en esta situación”.
Actuales y exempleados de Facebook dijeron que los comentarios de Cook dejaron a muchos en la compañía con la sensación de que Apple estaba fastidiándolos injustamente, mientras que los ejecutivos se quejaban de que Cook no estaba singularizando a sus competidores de redes sociales de la misma forma.
Abogados de Facebook y ejecutivos del área de comunicaciones discutieron cómo provocar preocupación por el tema de antimonopolio en torno a Apple a través de grupos de presión, apelación directa a las autoridades reguladoras o presentación de demandas antimonopolio, de acuerdo a personas al tanto del tema. Zuckerberg decidió que era mejor no volverse públicamente agresivo en ese momento, contó una de las personas.
A medida que Facebook se inquietaba, Apple presentó durante su conferencia de software en 2018 nuevas funciones para el iMessage que se parecían a los instrumentos de redes sociales, tales como un chat de video grupal, mientras que también introducía un instrumento de privacidad para su navegador web cuyo propósito era limitar los datos personales que podrían recolectar las aplicaciones como Facebook. Durante la presentación, Apple mostró a Facebook en sus ejemplos de cómo funcionaba.
Las propias acciones de la gigante de redes sociales estaban bajo la mirada escrutadora de Apple. En 2018, después que esta última encontró que una aplicación de seguridad de datos de Facebook llamada Onavo violaba sus políticas de recolección de datos, Facebook retiró la aplicación.
A principios de 2019, después de descubrir que otra aplicación de Facebook esquivaba las normas de Apple, esta prohibió una aplicación de investigación de Facebook y una serie de aplicaciones de desarrolladores internas que utilizaban los empleados de la empresa de redes sociales. La prohibición de aplicaciones internas de Facebook alteró severamente las operaciones de la compañía por un corto período.
Apple empezó a trabajar en instrumentos de privacidad incluso más dinámicos. A mediados del año pasado, anunció el instrumento App Tracking Transparency, el cual aún no se despliega. Como parte de su software de operaciones más reciente, indicó Apple, permitiría un seguimiento de avisos solo si los consumidores eligen esa opción cuando reciban un mensaje en un iPhone o iPad.
El cambio significa que Facebook u otras compañías ya no podrían recopilar el identificador de publicidad de una persona sin permiso. El identificador de avisos, una serie de números, es utilizado en general por agentes de datos y avisos digitales para rastrear a dónde van los usuarios en línea.
Frente a las reacciones negativas de Facebook y otras compañías, Apple postergó el despliegue del nuevo instrumento por algunos meses, pero anunció a fines del mes pasado que llegará a principios del tercer trimestre de este año.
Facebook aseveró que el nuevo instrumento representa una amenaza para su negocio.
“Los cambios de Apple los beneficiarán, aunque perjudican a la industria y la capacidad para que empresas de cualquier tamaño se comercialicen en forma eficiente y crezcan a través de una publicidad personalizada”, escribió Facebook en un correo electrónico a los avisadores políticos a mediados de diciembre al que tuvo acceso el WSJ. “No estamos de acuerdo con el enfoque y solución de Apple, sin embargo, no tenemos otra alternativa excepto mostrar el mensaje… Si no lo hacemos, creemos que ellos van a excluir a Facebook y otras aplicaciones de la App Store lo cual puede que dañe más a las empresas y usuarios que cuentan con nuestros servicios”.
A fines del año pasado, ejecutivos de Facebook, entre ellos Zuckerberg, consideraron unirse a la importante batalla legal contra Apple que emprendió Epic Games Inc., la compañía detrás del popular videojuego “Fortnite”, la que acusó a Apple de ejercer demasiado control sobre los precios, contó una persona al tanto del tema. Apple ha sostenido que su comisión está de acuerdo con otros mercados de aplicaciones.
En diciembre, Facebook indicó que colaboraría con Epic y proporcionaría materiales y documentos de apoyo, aunque no se unió a la demanda. Esa misma semana, la compañía de redes sociales puso avisos a toda página sobre el tema en varios periódicos, lo que incluyó el WSJ. “Estamos haciendo frente a Apple por las pequeñas empresas en todas partes”, decían los avisos.
Al verse enfrentada con litigios de la Comisión Federal de Comercio y fiscales generales de algunos estados por prácticas supuestamente anticompetitivas, Facebook ha sostenido que la competencia de Apple y otras compañías tecnológicas muestra que su empresa de redes sociales no es un monopolio.
Mientras tanto, la guerra de palabras continúa.
Los cambios sobre la privacidad que ha planeado Apple, dijo Zuckerberg a fines del mes pasado, afectan “el crecimiento de millones de empresas en todo el mundo”.
Después de desaprobar los modelos de negocios construidos en base a algoritmos, sin nombrar a Facebook, Cook expresó: “No se puede permitir que un dilema social se convierta en una catástrofe social”.
—Escrito por Deepa Seetharaman, Emily Glazer y Tim Higgins The Wall Street Journal. Jeff Horwitz colaboró con este artículo. (Traducido del inglés por “El Mercurio”).