Casi tres semanas se cumplen del conflicto que enfrenta a los pescadores artesanales e industriales en torno a la legislación de la "ley de la jibia", que impide, entre sus puntos más cruciales, el uso de la pesca de arrastre.
A la normativa, el 16 de enero, cuando se anunció el veto presidencial, se incorporó el método de cerco, que dividió aún más la posición de ambos gremios.
Ayer, representantes de pescadores artesanales de siete regiones llegaron hasta Concepción para reunirse con el subsecretario de Pesca, Eduardo Riquelme, cita en la que exigieron que se apruebe íntegramente la normativa votada en el Congreso.
Pascual Aguilera, vocero de la Coordinadora Nacional de Jibieros, luego de la reunión, sostuvo que se había fijado una "tregua de 48 horas para esperar que el Gobierno no vete la ley", y que en caso contrario van a intensificar las protestas callejeras. "Nosotros establecimos un plazo límite (miércoles al mediodía) para que retire el anuncio, para que no haga uso del veto presidencial y una vez que esté promulgada la ley, estamos dispuestos a conversar sobre una normativa que regule otros aspectos de la pesca de la jibia", dijo el dirigente.
En una postura mucho más radical, David Castro, presidente de la Coordinadora Regional de la Jibia del Biobío, anunció que "si no tenemos una respuesta del petitorio que hicimos, vamos a quemar Chile. El domingo hay una caravana a La Moneda, así que subsecretario de Pesca, ministro, Presidente, por favor, firmen el proyecto de ley que fue ganado en democracia".
Riquelme calificó estas palabras como "declaraciones muy desafortunadas" y adelantó que "tenemos múltiples alternativas que estamos valorando y los próximos días el Gobierno va a dar a conocer cuál es la decisión".
Previo a la reunión, los artesanales habían realizado una asamblea nacional en Talcahuano, en donde acordaron los puntos que se expondrían en la intendencia regional frente al subsecretario.
MESA INTERMINISTERIAL
En tanto, los pescadores industriales, uniformados nuevamente con sus chalecos amarillos -simulando a los manifestantes franceses-, llegaron durante la mañana frente a la sede del gobierno regional del Biobío para exigir ser recibidos por el subsecretario, solicitud que fue aceptada con una cita luego de la reunión con los artesanales.
"Ni contentos ni tampoco conformes", manifestaron al salir del encuentro. Su vocero, Juan Carlos González, presidente del Sindicato de Pesca Interempresas del Biobío, anunció que "el subsecretario ha aceptado canalizar nuestra propuesta de plataforma social hacia el ministro de Economía, para quienes pierdan sus trabajos, y generar una mesa interministerial con Trabajo", pero detalló que es evidente que deberán analizar con las bases la propuesta del veto presidencial.
Este artículo fue escrito por los periodistas Vanessa Vega y Rienzi Franco, de Economía y Negocios de El Mercurio.