Se discute intensamente y sin llegar a acuerdo, sobre cuál sería la densidad más apropiada para una plantación de manzanos moderna, con miras a maximizar su rentabilidad. Si bien el rango de distancias propuestas se ha ido reduciendo, sigue habiendo una gran diferencia al contabilizarse el número de plantas que se utilizarían por hectárea.
El presente artículo expondrá las ventajas y desventajas de la alta densidad de plantación de manzanos, considerado como punto crítico el momento en que se sobrepasa los 2.000 árboles/ha.
Algo de historia
Podría considerarse como un punto de inflexión el momento en que se comenzó a plantar a 4 x 2 metros, a mediados de los ochenta, entrándose así a lo que se denominó como alta densidad. De ahí en adelante, los avances han sido cada vez más lentos.
Iniciada la década del noventa, se estandarizó la distancia de plantación de 4 x 2 m, dando un total de 1.250 árboles/ha. Ello, gracias a la masificación del portainjerto enanizante EM 9. Debió pasar más de una década para que los productores comenzaran a reducir la separación sobre la hilera, hasta 1,5 m, lo que daba un total de 1.667 árboles/ha.
Ya entrado en el siglo XXI, los más audaces comenzaron a experimentar menores distancias de plantación, tomando como norma aumentar el número de árboles sobre la hilera, hasta llegarse a distancias tan cortas como 0,9 m; la entre-hilera se redujo hasta 3,5 m. De esta forma, se superaba la barrera de las 3.000 plantas/ha. Hoy es posible observar situaciones con distancias de 3 x 0,8 m, con 4.000 árboles /ha; incluso existen plantaciones comerciales de perales con 8.000 árboles/ha.
Como antecedente, cabe mencionar que en los años 60 del siglo anterior, el Dr. Fritz Winter señalaba que, para las condiciones de Alemania (48 ° L.N.), no tenía impacto favorable sobre la rentabilidad sobrepasar las 3.300 plantas/ha; más bien ocurría lo contrario. Por ello, cabe preguntarse si la sobre densificación que se observa es verdaderamente conveniente. Los hechos indicarían que no lo es.
Las ventajas de la alta densidad
Una mayor densidad de plantación tendría numerosas ventajas, siendo la precocidad de producción una de las más relevantes, al cubrir las plantas rápidamente el espacio asignado.
La reducción de la altura y el volumen de las plantas facilitarían las labores de cosecha, poda y raleo, permitiendo su mecanización. También se reduciría la cantidad de agroquímicos necesitados.
La sencillez de las instrucciones de poda aumentaría la eficiencia de ella.
La mayor exposición de la fruta al sol permitiría que ésta se coloree debidamente; su aclimatación a la radiación directa reduciría el nivel de daño por sol.
Finalmente, en plantaciones más densas es posible observar una menor heterogeneidad de las plantas y más homogeneidad en floración.
Las desventajas de la alta densidad
Entre las desventajas asociadas a la alta densidad figura un significativo mayor costo de plantas por hectárea, hecho que incidiría en la futura rentabilidad del cultivo. Ello, acompañado con una estructura de sostén ad hoc.
Desde nuestra perspectiva, el verdadero drama comenzaría en los años “off” (baja producción debido a añerismo), donde el exceso de vigor comienza a dificultar seriamente el manejo, debiendo controlarse con diversas estrategias: Regalis, anillados, poda de raíces.
Mayor número de hileras/ha; al reducir de 4 m a 3 metros la entre hileras, el tractor y los operarios deberán recorrer 3,3 en vez de 2.5 km/ha.
La sobreexposición de la fruta al sol generaría mayor daño por sol, por lo que en cvs sensibles debe recurrirse al uso de malla sombra. En este sentido, en el Centro de Pomáceas recomendamos sólo malla blanca, monofilamento, al 20%.
Finalmente y tal como se muestra en la Figura 1, al sobrepasar se las 2.000 plantas/ha, no aumentaría la curva de producción acumulada a la 6ª hoja.
Figura 1. Densidad de plantación vs rendimiento acumulado (ton/ha), de 17 diferentes huertos, al año 5. Nótese que el rango comprendido entre las 1.250 - 1.900 plantas/ha presenta casi todos sus valores sobre la recta trazada; sobre o bajo dicho rango, la mayoría de los huertos cae bajo la línea. Fuente: Prof. Óscar Carrasco. U. de Chile.
Recomendación
Estamos a favor de la alta densidad de plantación, entendida ésta como la mejor combinación para alcanzar una alta producción acumulada y facilitar el manejo. Por ello, nuestra recomendación para la zona de cultivo del manzano actual en Chile, es no densificar más allá de 3,8 x 1,4 m, lo que da un total de 1.880 árboles/ha.
Sí, definitivamente se puede hacer fruticultura rentable bajo las 2.000 plantas/ha.