MANUEL HERNÁNDEZ
Aunque para los santiaguinos la nueva cuarentena total en la Región Metropolitana (RM) pudo ser una sorpresa, a juicio de distintos especialistas era inminente y llega tarde.
Luego de dar cuenta de 7.716 nuevos contagios de covid-19, 45.776 casos activos, una positividad de 9,4%, 198 fallecidos y 182 camas críticas disponibles en todo el país, ayer el subsecretario de Redes Asistenciales, Alberto Dougnac, anunció que desde las 5:00 horas de mañana las 52 comunas retrocederán, por segunda vez en conjunto, a la fase 1 del plan “Paso a paso”.
“Es la región que nos preocupa de mayor manera”, admitió la subsecretaria de Salud Pública, Paula Daza. “Aunque la positividad en las últimas semanas en la RM ha disminuido, hemos visto un aumento de un 4% en los últimos siete días y un 25% en las últimas dos semanas”, argumentó. Ratificó que “en la ocupación de camas críticas hay un 96% a nivel nacional y un 98% en la RM”.
Si bien se trata del segundo confinamiento para toda la región, luego del aislamiento de 31 días que rigió entre el 27 de marzo y el 28 de abril, es el tercero para el Gran Santiago, ya que el del año pasado excluyó a 11 de las 52 comunas metropolitanas.
El factor urgencias
Para el exsubsecretario de Salud Pública Jaime Burrows, “esta cuarentena es crónica de una muerte anunciada (...). Creo que debimos haber tomado esta medida antes”. No obstante, cree que al implementarse en toda la región “se da algún tipo de señal para la gente, para que trate de cuidarse, y eso tiene que ser reforzado al decirle a la gente que hoy día si se enferma de alguna patología que requiera atención de urgencia, probablemente no van a recibir atención, porque los servicios de urgencia están trabajando con los casos más graves”.
Coincide la presidenta del Colegio Médico de Santiago, Francisca Crispi: “Es difícil evaluar el anuncio porque se enmarca dentro de un plan ‘Paso a paso' que está totalmente fracasado (...). Es una medida tardía y que llega reconociendo el desastre hospitalario que hay”, plantea.
Respecto de los cuestionamientos que rondan a la efectividad de las cuarentenas transcurridos casi 15 meses de crisis sanitaria, con una población que, además, da muestras de una progresiva “fatiga pandémica”, Daza afirmó que “particularmente en las comunas más grandes hemos visto una respuesta positiva de las cuarentenas”. Eso sí, reconoció que “obviamente, después de un tiempo prolongado esa medida tiende a disminuir su efecto, pero hoy día, frente a la situación crítica que estamos viviendo de camas críticas, es la medida que hemos visto importante implementar al menos durante las próximas semanas, para disminuir los casos y disminuir obviamente la necesidad de camas críticas”.
Para ganar tiempo
Ante este crítico escenario de la red asistencial, las autoridades urgieron a los rezagados a vacunarse.
Según el Departamento de Estadísticas e Información en Salud (DEIS) del Ministerio de Salud, hay 2.845.793 mayores de 23 años que no acudieron a recibir sus dosis cuando les correspondía.
El director del Instituto de Salud Pública de la U. Andrés Bello, Héctor Sánchez, dice que la vacunación debe ser potenciada durante esta nueva cuarentena: “El tema aquí es a qué velocidad vamos a avanzar en la inmunización. La campaña de vacunación es clave, la vacuna es la que en definitiva nos va a sacar de este problema”. Y concluye: “Esta cuarentena es para ganar tiempo; esta cuarentena es difícil que vaya a cortar la cadena de contagios, porque para eso, además, necesitamos un buen sistema de testeo, trazabilidad y aislamiento y eso tampoco está funcionando bien. Entonces, aprovechemos el tiempo que se va a ganar y vacunemos a la mayor cantidad de gente posible”.
CRISIS HOSPITALARIA
Ayer se oficializó la suspensión de las cirugías electivas y ambulatorias.