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Cartas
Viernes 04 de junio de 2021
Un error monumental
Señor Director:
El diputado Alessandri propuso una reforma constitucional que autoriza a retirar el 100% de los ahorros previsionales. Es un error monumental.
No tiene chance el peligro que aduce el diputado. La gran mayoría de los convencionales electos ha declarado que respetará los derechos de propiedad de los trabajadores chilenos sobre sus ahorros previsionales. Y así lo exige más del 70% de los encuestados.
Por otro lado, de aprobarse, generaría dos daños directos al derecho a la seguridad social, derechos que los convencionales quieren fortalecer, no debilitar:
1. Impedirá a grandes grupos de trabajadores con empleo formal acceder a pensiones de vejez de una cuantía proporcional a sus remuneraciones imponibles. En efecto, la experiencia internacional y chilena con la libertad total de ahorro para la vejez muestra que grandes bloques de personas son “imprevisores”, es decir, ahorran de modo insuficiente para la vejez. La evidencia neurocientífica ha confirmado que los humanos tenemos una tendencia sistemática hacia el optimismo injustificado (Sharot, 2011). Por lo tanto, impedirá a muchos trabajadores acercarse a tener en la vejez un nivel de vida parcialmente comparable al que tuvieron en su vida activa.
2. Entre personas de 65 años, un cuarto vive más allá de su cumpleaños 90 y un cuarto muere antes de cumplir 80. El costo acumulado de sostener la vida hasta su término varía enormemente entre personas. Este enorme riesgo individual solo es superable con algún mandato de participar en una seguridad social que incluya seguros de longevidad, con pensiones “vitalicias”. La experiencia internacional muestra que, en ausencia de seguridad social contributiva, los trabajadores sufren fuertes dificultades para manejar la incertidumbre en la duración de su vida. Así, perder la seguridad social obligatoria perjudicaría a muchos.
La seguridad social sería destruida por la propuesta del diputado Alessandri. Además, infligiría un enorme daño a la solvencia fiscal y gatillaría desequilibrios en el precio de los activos, dañando la estabilidad financiera.
Salvador Valdés Prieto