El balance entre cine pop y relato con profundidad no siempre se da. Es una mezcla esquiva. Pero en esta película uruguaya, basada en la novela del ex futbolista, entrenador y escritor Daniel Baldi, funciona. Correcto relato sobre el ascenso y posible gloria de un chico de 14 años con talento superior para el fútbol, llamado Tito y de clase trabajadora, esta película puede inducir a engaños. Si su estética parece mera y superficial entretención para hacer caer incautos, hay que aclarar que esta apuesta no tarda en crecer, y bastante bien, por el camino de la seria anotación social cuando se trata de subrayar cómo funciona la explotación y mercadeo de talentos infantiles del balompié en la cancha del deporte rey. Además de entretener mediante un bien usado lenguaje del melodrama, lo que hay en "Mi mundial" es un abanico rico y reconocible de fauna humana latinoamericana: entrenadores, jugadores, padres buscando salir de la pobreza y, sobre todo, un sentido de barriada que hace de este filme un pequeño gol de media cancha.
Drama. Uruguay. 2017. 102 min. T.E.