Señor Director:

En un reciente editorial titulado "Deterioro en ciudades balneario", "El Mercurio" informa que vecinos de Reñaca, Maitencillo y Pucón han denunciado problemas similares sobre "proliferación del comercio ambulante, desórdenes en los locales nocturnos, excesivo consumo de alcohol, venta de drogas, aumento de la delincuencia, liberalidad en los permisos municipales que se otorgan y falta de planificación urbana en general".

Puedo confirmar que Viña del Mar y Reñaca, ciudades en las que he vivido familiarmente desde mi infancia, están sufriendo un acelerado deterioro en los últimos años, principalmente por la ausencia de una autoridad que planifique, regule y proteja la calidad de vida de los vecinos y el patrimonio histórico comunal, privilegiando una gestión populista y efectista. Esta situación se agrava con la información de que la Municipalidad de Viña del Mar tuvo un déficit cercano a los $15.000 millones el año pasado, publicada en "El Mercurio".

Tal como dijo Iván Poduje en su carta, "este problema ha sido advertido en reportajes, editoriales y columnas, pero al municipio parece importarle poco".

Ya es hora de que los alcaldes de Viña del Mar (Viña y Reñaca), Puchuncaví (Maitencillo), Zapallar (Laguna de Zapallar) y Pucón asuman su responsabilidad y respondan públicamente por estas denuncias vecinales que están afectando en forma irremediable la calidad de vida, historia patrimonial y condición turística de esas comunas.

Jorge Yarur Bascuñán