El Mercurio.com - Blogs : Reinventarse en Navidad
Cartas
Domingo 17 de diciembre de 2017
Reinventarse en Navidad
Señor Director:
Un peligro inminente, presente en todos los ámbitos de la comunidad, es la rutina diaria que afecta a muchos y puede conducir a las personas al deterioro emocional, afectivo, relacional, laboral, psicológico, etcétera.
He sido testigo en los ambientes carcelarios de este veneno, que se va deslizando al principio muy sutilmente, para luego invadir la vida entera, en una suerte de somnolencia, un adormecimiento del alma, un estado de ausencia, no alegría, fatiga, no querer despertar, un no constante que desintegra, aplasta y derrumba.
El tiempo de Navidad podría ser propicio para tantos que no visualizan otra perspectiva que sus recuerdos dolorosos, que, como fantasmas inmortales, los persiguen, asedian y amenazan. El Dios hecho hombre nos lanza hacia los ilimitados valles y horizontes por donde poder mirar y caminar hasta el encuentro con ese otro yo, muy oculto, pero muy real, que puja por ponerse de pie para empezar otra vez. Innovación, creatividad, reinventarse es lo que se necesita para poder, lanza en ristre, vencer la rutina que genera tanta mediocridad, inacción, hastío y pobrezas de mil maneras.
"Y Dios se hizo carne" es la lección más grande de todos los tiempos, la "Palabra" impactó el universo, resonando límpida y poderosamente en los corazones nuestros, invitándonos a romper lo que deshumaniza, tirar las corazas de nuestros miedos y cobardías, las rigideces obsoletas que desarticulan y excluyen.
Consecuente con lo anterior, celebro la bondad y generosidad de algunos empresarios que han resuelto entregar a la Fundación Paternitas un aporte significativo, en dinero, para poder llegar a un determinado número de familias, las más pobres y vulnerables, de las más de 900 que durante este año hemos atendido.
Una cena distinta, bajo la estrella del nacimiento de Jesucristo, en familia, partiendo el pan y tomando el vino del amor común entre los que se quieren, potencia un cambio fundamental, despierta sueños, surge el abrazo del perdón y un mañana en comunión.
Pbro. Padre Nicolás Vial Saavedra