Emma Watson es Mae, una joven que entra a trabajar a la que se supone es la mejor empresa del planeta: El círculo, una especie de engendro tecnológico que mezcla Apple con Facebook y el caldo de cultivo para que el realizador James Ponsoldt (que ya sacó aplausos con "The Spectacular Now" de 2013) haga apuntes moralistas sobre cómo las nuevas tecnologías nos cambian -internamente- y, además, nos alteran -externamente- la vida.
La permanente y adictiva conexión a internet versus la vida "libre" y salvaje son una idea quizás maniquea, pero la película, en su primera parte, entra bien en esa dinámica que, sin embargo, no tiene éxito para sostenerse en lo que viene a continuación: el ingreso a esta especie de credo llamado "El círculo": un mundo parecido a una religión y a una secta cuyas aristas y fronteras son solo esbozadas pero no profundizadas. Tom Hanks como una especie de Steve Jobs queda igualmente a medio camino, pero, a pesar de sus yerros narrativos y de que "El círculo" no cierra bien, posee la gracia de ser una alerta moralista -quizás demasiado moralista- sobre los tiempos que corren.
"The circle". Drama. 2017. 110 minutos. T.E.