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Cartas
Martes 28 de febrero de 2017
Aborto terapéutico
Señor Director:
En su última carta, el profesor Ugarte realiza afirmaciones erróneas respecto del concepto de aborto que me parece relevante corregir.
Tal como lo señala la Organización Mundial de la Salud, aborto es la interrupción del embarazo cuando el feto todavía no es viable fuera del útero. Por lo tanto, aunque el señor Ugarte no lo quiera reconocer, es también un aborto aquella interrupción del embarazo que se realiza para salvar la vida de la madre, si se hace antes de alcanzado el tiempo de gestación en el cual el feto puede sobrevivir fuera del útero. En el ejemplo que propone (una mujer que luego de subir un cerro pierde a su criatura), ella será ingresada al hospital por un aborto y es probable que requiera de tratamiento médico por esta causa. Tanto es así que en la clasificación internacional de enfermedades (CIE-10), existe un listado específico para los embarazos que terminan en aborto, que incluye a los embarazos ectópicos, aborto retenido, aborto espontáneo, entre otros diagnósticos.
Asimismo, en las estadísticas del Ministerio de Salud de 2014 hubo alrededor de 30.000 egresos hospitalarios por embarazos terminados en aborto, por distintas causas, la gran mayoría claramente involuntarias.
Entiendo que la intención del señor Ugarte pueda ser la de recalcar que cuando existe riesgo para la vida de la madre, el aborto no busca la muerte del feto, sino que salvar la única vida que es posible de salvar. Pero sigue siendo aborto según las definiciones médicas usadas universalmente. En estas mismas páginas, el profesor Ugarte señalaba en mayo de 2014 que en aquellos casos en que es necesario extraer el feto cuando aún no es viable para salvar la vida de la madre, "ni aún así es lícito disponer de la vida del hijo... el aborto es ilícito aunque de no sacrificar al hijo hayan de morir este y la madre". Por lo menos en su carta reciente considera lícito interrumpir el embarazo para salvar la vida de la madre, aunque no comparto su idea de que por ser algo moralmente lícito (y que en la práctica se realiza en nuestro país), sea innecesario legislar al respecto.
Sofía Salas Ibarra
Programa de Ética y Políticas Públicas
en Reproducción Humana
Universidad Diego Portales