Señor Director:

La ex ministra Mariana Aylwin, con su visado vigente, debía viajar a La Habana a recibir en representación de su padre, don Patricio Aylwin, ex Presidente de la República, la distinción que la Fundación Oswaldo Payá le había conferido en recordación de su lucha por la democracia y los derechos humanos. No obstante, ella no pudo embarcarse en su avión por orden del Departamento de Inmigración de Cuba.

Esta arbitraria decisión infiere un agravio inaceptable a la memoria de don Patricio Aylwin, a su propia hija y al Partido Demócrata Cristiano, y resulta impropia entre dos estados que mantienen relaciones diplomáticas, pues vulnera la Convención Americana sobre Derechos Humanos y la Carta Democrática Interamericana de la OEA.

Frente a estos repudiables hechos, expresamos nuestra más enérgica condena y demandamos del Ministerio de Relaciones Exteriores elevar ante el régimen cubano una formal protesta de rechazo a tan repudiable conducta, y reiteramos nuestra solidaridad con los hermanos cubanos en su lucha por la recuperación democrática, la libertad y el respeto de los derechos humanos en Cuba, como valores de categoría universal e inherentes a la dignidad humana.

Nelson Hadad
Presidente Comisión de Relaciones Internacionales
Partido Demócrata Cristiano