José Joaquín Suzuki y Diego Zuñiga

"Voy a pedir disculpas al juez", aseguró ayer Leonardo Azagra Valdivia (25) mientras cuatro carabineros lo devolvían al cuartel de la Dirección de Investigación Criminal (OS-9), en Ñuñoa, luego de un examen médico de rutina.

Poco antes, a las 09:30 horas, el condenado por el homicidio de una mujer, que el lunes protagonizó una fuga sin precedentes al usar a un magistrado de San Bernardo como escudo humano, había sido recapturado por la policía uniformada, cerrando un episodio que además desnudó debilidades en la seguridad de los tribunales.

Azagra fue ubicado por un equipo especial de Carabineros, que siguió su pista vigilando las viviendas que solía frecuentar -una de ellas alcanzó a ser allanada en Lo Espejo- y a su círculo más cercano. Durante cinco días "deambuló por diversos domicilios de gente que le prestaba colaboración y otros lugares en donde derechamente ignoraban quién era", relató el fiscal de Alta Complejidad Occidente, Pablo Sabaj.

Pero finalmente fue capturado en la misma comuna de San Bernardo, a solo 2,3 kilómetros del tribunal donde el lunes hirió con un cuchillo al gendarme que lo custodiaba e intimidó con la pistola de este al juez Sergio Henríquez, para luego escapar corriendo con el peto amarillo de imputado aún puesto. Azagra estaba en una casa de la calle Antonio Varas, donde se reúnen consumidores de pasta base.

Fuentes que conocieron el operativo precisaron que el reo habría estado drogado y que cuando los carabineros lo interceptaron negó ser el prófugo. No obstante, fue reconocido por sus tatuajes, confirmó el fiscal Sabaj.

No opuso resistencia, e incluso habría comenzado a llorar, supuestamente arrepentido. "En algún minuto, sí reconoce sus pecados en la parte criminal", afirmó el general Daniel Tapia, jefe del OS-9.

Diligencias clave

Tanto en Carabineros como en el Ministerio Público recalcaron el trabajo de inteligencia que se realizó en torno al círculo más cercano de Azagra y de la "red de apoyo" con que contó durante la semana. Así, una serie de seguimientos y entrevistas permitió precisar dónde estaba.

Por ejemplo, en la noche del lunes -mientras la cinematográfica fuga del reo acaparaba titulares en la televisión-, una de sus ex parejas concurrió a la fiscalía para relatar que él la amenazaba desde Colina II -donde estaba recluido- para que lo dejara ver a dos de sus hijos.

Ella dio el nombre de otra mujer que sería la actual pareja. Según el OS-9, esta última era parte de la "red de apoyo" y le facilitó contactos y comunicaciones para ocultarse, etapa en la que incluso el prófugo amenazó a su propia madre para que no lo delatara.

Hoy, Azagra volverá al tribunal de donde se escapó, para ser formalizado por secuestro, amenaza a la autoridad, robo con violencia, robo con intimidación y disparos en la vía pública.

Como ya estaba condenado por un homicidio, debería regresar al módulo 12 de Colina II para cumplir una pena hasta 2023. No obstante, Sabaj reveló que se evalúa un posible traslado.

"Vamos a pedir una opinión a Gendarmería para ver si es aconsejable que continúe cumpliendo condenas en otro recinto", comentó. Una de las opciones es la Cárcel de Alta Seguridad.

Cualquiera sea su destino, en paralelo seguirá sesionando una mesa de trabajo que autoridades formaron para reforzar las medidas de seguridad en tribunales.

Pendiente
La Taurus modelo PT-99 que robó al gendarme no ha sido aún encontrada.

"Para nosotros es muy reconfortante que en cinco días se haya recapturado a una persona extremadamente peligrosa, que tenía conmocionado al país".
NICOLÁS MENA
Ministro de Justicia (s)

"Los jueces y fiscales no tenemos miedo de que nos pongan una pistola en la cabeza".
PABLO SABAJ
Fiscal de Alta Complejidad Occidente

"El paco me lo pasó (el cuchillo). ¡El paco, te estoy diciendo!".
LEONARDO AZAGRA VALDIVIA
Respondiendo a periodistas sobre cómo consiguió el arma con que hirió al gendarme que lo custodiaba