En unos meses se estrena una coproducción estadounidense y española basada en la novela de Patrick Ness y con un título que resume un subgénero del terror: "Un monstruo viene a verme".

Vienen desde la fantasía afiebrada o por un último deseo desesperado e inoportuno, en los juegos de mesa o dentro de un objeto del tipo cajita de música, o bien navegan por los sueños o son huérfanos que llegan a una familia equivocada y espantosa.

El caso es que son niños y hay adolescentes atrapados por historias que giran en torno a sus miedos y puntos de vista.

El valor agregado, en este caso, es el actor Jacob Tremblay como Cody, que subió sus bonos con "La habitación" (2015), pero su futuro inmediato, porque en esto no hay novedad en el frente, son los papeles como niño genio, deforme, endemoniado o con poderes especiales.

Jessie (Kate Bosworth) y Mark (Thomas Jane), el matrimonio que adopta al silencioso Cody, necesita ahogar una pena y olvidar el pasado: su pequeño hijo murió en un accidente doméstico.

El recién llegado es prudente, recatado y encantador, pero hay algo que no está bien con el niño. La pareja lo advierte, pero no saben exactamente la razón de la inquietud y Cody, en el colegio, hace migas con una compañera y aparece el matón del curso, que para su mala suerte se mete con la persona equivocada.

Esta es una película con capítulos tradicionales, porque el terror industrial se basa en rutinas parecidas, sucesos similares y en cadenas que se repiten.

En "Somnia. Antes de despertar" la obra gruesa es la típica.

Cody llega a su nuevo hogar.

Suceden los primeros acontecimientos raros, que son tan leves como el vuelo de una mariposa colorida que así como aparece, también desaparece. Vienen las explicaciones.

Ocurren las segundas cosas raras, es decir: vuelven las mariposas, pero no regresan solas. Las renovadas explicaciones no convencen a nadie.

Aparecen los terceros hechos extraños, pero a estas alturas no hay tiempo para más argumentos, sino para salir arrancando, si se puede, o bien para enfrentar lo que venga por delante.

Este es un subgénero que se ajusta al orden y a los tópicos de atmósfera y suspenso, que deben ser interrumpidos por golpes de efecto. "Somnia. Antes de despertar" se ciñe al manual e insinúa alguna curva y ciertas ganas por trizar el molde, pero no hay que tomarlo en serio y no vaya a ser que se rompa, porque para sobrevivir con lo justo no hay nada como lo de siempre.

Y Mike Flanagan, editor, escritor y director, es un especialista y la mitad de su filmografía pertenece al género.

Es cierto que Flanagan nunca ha hecho nada bueno, pero lo hizo de nuevo.

El tráiler de su próxima película ya está circulando, porque se estrena el 21 de octubre en Estados Unidos, su título es "Ouija: el origen del mal" y ya se distingue a una niñita media poseída.

De nuevo lo hizo.

"Before I wake". EE.UU., 2016. Director: Mike Flanagan. Con: Jacob Tremblay, Kate Bosworth, Thomas Jane. 97 minutos. Mayores de 14 años.