Esta es una historia basada en hechos reales y Cynthia Wade, hace años, hizo lo que correspondía y filmó el documental "Freeheld" (2007), una película de media hora que aparte de galardones en Sundance y en el festival de Boston, ganó el Oscar al Mejor Cortometraje en su categoría.
La película "Free love", de Peter Sollett, es un refrito, un calco y una reproducción de una historia que parte con una pareja, sigue con la tragedia del cáncer y finalmente se convierte en una bandera ética y legal por los derechos de una mujer que ama a otra mujer.
Una es Laurel Hester (Julianne Moore), experimentada detective del condado Ocean de Nueva Jersey, y la otra es Stacie Andrée (Ellen Page), una joven mecánica que bien podría ser su hija.
Ambas contraen un vínculo legal como pareja, compran una casa a crédito y aspiran a una vida civil, corriente y silenciosa, hasta que a Hester le descubren un cáncer expansivo e invasivo. Esta mujer, que siempre confió en el sistema y que durante 23 años cumplió con su deber en las calles y corriendo peligro, pide un deseo para cuando se muera: dejarle su jubilación a Stacie.
Pero los "freeholders" del condado de Ocean, los funcionarios de elección popular que componen el gobierno local, le niegan ese derecho al no estar casada con un hombre.
Esto provoca que lo de Hester y Stacie se convierta en un caso simbólico que es un prólogo del cambio de legislación que ya se avecina.
"Free love", sin embargo, se convierte en una película liviana y más bien inútil, porque sus recursos son gruesos y sus personajes son caricaturas sin pliegues ni matices.
La blancura de la pareja protagonista está en el rango de las vidas ejemplares, donde Hester es una estatua andante del deber, la corrección y las cosas bien hechas, y Stacie es una mecánica silenciosa, honesta, eficiente y leal. Y Steve Goldstein (Steve Carrell), el abogado que defiende su causa, es un activista elemental que hace lo que hacen los activistas: agitan pancartas, gritan y chillan. Eso es todo.
Las aspiraciones de la película se descubren en el afán por hacerlo de nuevo: Julianne Moore, en "Siempre Alice" (2013), ganó el Oscar como una mujer enferma de cáncer. Ron Nywaner, el guionista, ya estuvo nominado al Oscar por "Filadelfia" (1993).
Lo tercero es la carga lacrimógena efectista, calculadora y ácida.
Y los "freeholders", por último, esos funcionarios del condado, por cierto que son como deben ser: turbios, cobardones y miserables.
Sólo hay un personaje rescatable, porque es un ser humano normal, es decir, complejo y de varias piezas y no de una: el detective Dane Wells (Michael Shannon), que no es más que un secundario.
Existe un tráiler de "Freeheld", el cortometraje de 2007, que está en la página www.imdb.com y dura 3 minutos y 41 segundos.
En ese tráiler existe naturalmente lo que esta película prepara tan artificialmente: honestidad, limpieza y cariño. "Freeheld". EE.UU., 2015. Director: Peter Sollett. Con: Julianne Moore, Ellen Page, Michael Shannon. 103 minutos. Mayores de 14.