"La casa del fin de los tiempos"

No se deje engañar por los prejuicios. Esta gran película de terror venezolana es una sorpresa por donde se la mire. Puede que su look de bajo presupuesto lo engañe. Pero a medio andar su portentoso guión será capaz de envolverlo. En los años 80, Ruddy Rodríguez (actriz de teleseries y modelo venezolana) es Dulce, una atribulada dueña de casa que mira con espanto cómo fenómenos raros y fuera de una explicación racional asolan a su hogar y a su familia: un marido distante y dos hijos pequeños. El director y guionista Alejandro Hidalgo se atreve, y logra con éxito explorar un género tan difícil como el terror desde la vereda latinoamericana. Y lo que consigue es una película que crece a medida que avanza y que contiene un guión armado, ordenado y funcional con tal de darle varias vueltas de tuerca necesarias en virtud de espantar y sorprender al espectador. Muy buena. Terror. Venezuela. 2013. 101 minutos. T.E.

"Una buena receta"
Bradley Cooper tiene talento de sobra, y como el chef Adam Jones, un cocinero que quiere resurgir como un ave fénix después de un oscuro pasado de drogas, excesos y destrucción, convence. El director John Wells, que tuvo mejores resultados al mando de "Agosto" ("August: Osage County"), se esmera acá por cocinar a punto un drama emotivo y de redención. Quizás hay demasiadas pausas frías a nivel dramático entre los bocados centrales que dibujan el arco emotivo de este artista de la gastronomía, cuyo pasado lo persigue e impide triunfar de nuevo. Quizás hay fallos en la descripción demasiado capsular de la cocina, del look publicitario a los platos y del making of de un restaurante clase A de Londres. Pero Bradley Cooper sale adelante y lo que queda es un menú aceptable para disfrutar al paso de una película entretenida. "Burnt". Drama. EE.UU. 101 minutos. T.E.

"Suite francesa"
Basada en el best seller de Irène Némirovsky, esta adaptación toma parte de aquel relato escrito incompletamente en el fragor de la ocupación nazi en Francia, y pone sobre la pantalla no solo el "amor" imposible entre un oficial nazi (Matthias Schoenaerts) y una joven francesa (Michelle Williams) que espera a que su marido regrese del frente de batalla. Además, es un retrato del cosmos horroroso y angustioso de la ocupación: un fondo social interesante y dantesco, que mantiene vivo el efecto verosímil de una historia improbable, pero que bajo la solvencia de sus actores, que además de Williams y Schoenaerts, suma el talento de Kristin Scott-Thomas como una suegra malas pulgas, ayuda a fluir un relato melodramático óptimo, pero que basa demasiado su pilar en suspiros contenidos, miradas fugaces y encuentros furtivos bajo el halo de una superproducción. Sin embargo, "Suite francesa" atrapa la atención y en su coqueteo con el lenguaje de Hollywood y su mano de obra gruesa, logra a ese pesar construir escenas delicadas y emotivas. No ganará ninguna guerra, pero sí que hay pequeñas batallas emocionales que conquistarán a cinéfilos. Drama. Inglaterra/Canadá/Francia/Bélgica. 107 minutos. T.E. + 7.

"Barbecue: Entre tragos y amigos"
A pesar de su afán masivo, de su carácter abiertamente comercial, este filme francés tiene momentos con más capas que la mera diversión. Es decir, la comedia construida con la historia coral de un grupo de amigos parisinos, cuarentones y cincuentones, da para la trama light y frugal, pero además para secuencias más elaboradas dentro de su género. Lambert Wilson es Antoine, a punto de cumplir los 50 años, con una vida sana, sin comilonas ni excesos, pero con un viraje de emergencia cuando sorpresivamente sufre un ataque al corazón. Esposa y amigos suyos, un grupo cohesionado y divertido, pasan así a ser el muro de frontón que comienza a recibir los pelotazos emocionales del protagonista cuando, tras su accidente coronario, se lanza a gozar de la vida y a decir verdades sin filtro. Si bien algunas de las sub-tramas se pierden o se anticipan en su organización predecible de "good feel movie", actores, guión (del chileno Héctor Cabello Reyes) y dirección son un ensamble tan amigable entre sí como los personajes en pantalla. Hay cariño, por ellos y por los espectadores. Buena. Comedia. Francia. 2014. 98 minutos. T.E.

"Guerra de papás"
Después de la mediocre comedia "Policías de repuesto" (2010), Will Ferrell y Mark Wahlberg vuelven a hacer equipo en esta aún más mediocre cinta de humor: una excusa mal pensada y desarrollada acerca de dos hombres, un padre biológico (un rebelde a cargo de Wahlberg) y un padrastro (cándido y tierno interpretado por Ferrell), que luchan entre ellos por el cariño de sus dos "hijos". El género de la comedia, quizás el más difícil, no significa lanzar y filmar las primeras y burdas ideas que se puedan ocurrir. Tanto Ferrell como Wahlberg han demostrado que pueden ser divertidos y cómicos, pero el nivel de este filme deja mucho que desear, pues sólo se trata de una seguidilla de gags hilados sin demasiada gracia ni talento. "Daddy's home". Comedia. 2015. EE.UU. 96 minutos. T.E.