El Mercurio.com - Blogs : Un acto significativo
Cartas
Martes 01 de diciembre de 2015
Un acto significativo
Señor Director:
Se ha cumplido ya una semana desde que se realizara el acto reparatorio que acogía a los profesores exonerados por sus convicciones, celebrado a iniciativa de su rector en la Pontificia Universidad Católica de Chile.
Algunos, felizmente muy pocos, no lo aprobaron, y menos se alegraron; otros, los menos, lo rechazaron. El hecho fue que la participación en el acto mismo fue cercano a las setenta personas, que, por sí mismas o por sus representantes, se acercaron a recibir su diploma que reconocía su condición docente y una medalla conmemorativa.
Los discursos fueron claros y contundentes. Nos hablaron de la vida universitaria como esencial y necesariamente participativa y, para lograrlo, también de la libertad de cátedra. Comenzamos con una oración sencilla y de bendición, que consideraba que entre los participantes había creyentes y no creyentes. Se trataba, en una palabra, de que la universidad en cuanto católica pudiera abrir sus brazos y acogerlos a todos.
La experiencia fue hermosa. Nos faltaba, pero llegó. La cena compartida que siguió al acto solemne fue de alegría y de fraternidad. Muchos, hacía tiempo que no se encontraban. Cuando sus padres ya no estaban entre nosotros, llegaron hijos, y hasta nietos a recibir el reconocimiento debido.
Si se quiere, tardíamente. Con todo, siguiendo los pasos del Papa Francisco, la Universidad actuó como Iglesia "en salida" y, en su condición propiamente universitaria, configurando un signo realmente dialogante.
Algunos no estaban. Habían sido sacados violentamente de sus vidas, y no solo de su cátedra. Otros, porque la herida había llegado hasta vaciar el plato de comida de los hijos. Los que estábamos, seguramente mirando hacia el futuro, queríamos alegrarnos en la esperanza. Así fue la cena: con cantos, música y aceleradas conversaciones con que se quería recuperar el tiempo perdido.
Gracias, entonces, a la PUC, representada por su rector y muchos decanos, miembros del Consejo Superior, y, a la vez, a la Comisión, que trabajó desde agosto, nombrada por la autoridad universitaria y que logró reunir a muchos más de los que se esperaban.
Percival Cowley V. ss.cc.