Leslie Ayala

Otra dura sentencia por un "portonazo" emitió el Segundo Tribunal Oral de Santiago.

A la sentencia de 10 años y un día para un adulto dictada hace algunas semanas se suma ahora un severo fallo contra un menor de 16 años que intimidó a un vecino de Conchalí para quitarle su vehículo mientras lo estacionaba en su casa.

Los jueces Nelson González, Rafael Andrade y Paula Rodríguez condenaron al adolescente a la pena máxima de 5 años en recinto cerrado con un plan de reinserción social.

Según estableció en juicio oral la fiscal de la zona Metropolitana Centro Norte, Marcela Adasme, el 14 de julio de este año, cerca de las 21:10 horas, el joven aprovechó que Sergio Alvarado descendía de su Jeep -para guardarlo en su casa- para intentar robar su auto.

Mientras la víctima abría el portón -dice el dictamen-, B. O.V. se abalanzó sobre él, "lo tomó del cuello y le exigió la entrega de las llaves del móvil, bajo amenazas de tener una pistola". Como Alvarado se opuso -dice la acusación del Ministerio Público-, "se inició un forcejeo entre ambos, cayendo al suelo y comenzando a gritar la víctima, quien solicitó ayuda, siendo auxiliado por vecinos, que logran reducir al imputado hasta la llegada de personal policial".

El tribunal calificó el hecho como un robo con intimidación y violencia, advirtiendo que si fuera mayor de edad, el agresor arriesgaría penas que van hasta los 20 años de cárcel. La causa se tramitó bajo la Ley de Responsabilidad Penal Adolescente, por lo que la pena impuesta es una de las más severas a la que se exponía el menor de edad.

Durante el juicio oral, la víctima se presentó a declarar, y según recoge el fallo, cuando "fue a abrir el portón para entrar el vehículo, sintió que una persona lo pescó por la espalda y le dijo que le pasara las llaves, porque si no, lo iba a matar, ya que tenía una pistola. En ese momento se giró y tuvo un entrevero para que no le quitara las lleves, y cayeron al suelo".

Agregó que sólo se vio frustrado este "portonazo" cuando se escucharon los gritos de la víctima y una hermana pidió auxilio a los vecinos.

Reincidencia en la Ley Penal Adolescente

El magistrado Rafael Andrade, según el fallo dado a conocer esta semana, estaba incluso por imponer una pena de 7 años para el menor en un recinto cerrado del Sename.

En su voto de minoría, el juez analiza que tuvo especialmente presente para disentir en la condena y sostener que el acusado debía cumplir una más alta por la reincidencia. "Este ilícito el adolescente lo comete, habiendo sido condenado, recién el día 17 de junio del año 2015, también por un delito de robo con intimidación", dijo el juez en su prevención.

Andrade argumenta entonces que en este caso la Ley de Responsabilidad Adolescente lo privó a él y a los demás jueces "de considerar, procedente la agravante de reincidencia específica del Código Penal", que en este caso -a su juicio- "se haya latamente fundada, al registrar este adolescente, en su extracto especial de filiación y antecedentes penales -esto es, desde los 14 años-, un total de 7 condenas previas, cuatro de ellas por delitos de robo con intimidación".