El Mercurio.com - Blogs : Modernización del SHOA
Editorial
Lunes 14 de septiembre de 2015
Modernización del SHOA
La Armada ha fortalecido a ese organismo, que fracasó gravemente el 27-F, mejorando los estándares de seguridad para la población e instalaciones del borde costero de Chile...
Entre las principales modernizaciones emprendidas por nuestro país tras el fracaso colectivo que representó la reacción de las instituciones estatales frente al terremoto y maremoto del 27 de febrero de 2010, que causó la muerte de 156 personas y la desaparición de otras 25 en localidades de la zona costera, destacan los cambios implementados en el Servicio Hidrográfico y Oceanográfico de la Armada (SHOA).
Una de las primeras medidas adoptadas por la Armada fue cambiar la dependencia orgánica de este servicio pasando del Estado Mayor de la Armada a la Dirección General del Territorio Marítimo y Marina Mercante, cuya capacidad técnica favorecería al SHOA. Adicionalmente se le asignaron importantes recursos, 4 mil millones de pesos, para invertir en nuevos equipos, infraestructura y personal. Este último ha sido sometido a un intenso y constante proceso de capacitación para enfrentar, entre otros, algunos de los escenarios que hicieron colapsar a esta institución en 2010.
El rediseño del Sistema Nacional de Alarma permite hoy establecer en menos de cinco minutos si después de un terremoto hay probabilidades o no de la existencia de un maremoto. Para esos efectos, el SHOA desplegó un programa de densificación de los mareógrafos o estaciones a nivel del mar a lo largo de las costas del territorio nacional. En febrero del 2010 existían solo 17 en operación; hoy se cuenta con 40, entre Arica y la Antártica. Asimismo, se intensificó el reporte de información, pues ahora esas estaciones entregan sus datos sobre cambios en los niveles del mar cada cinco minutos, mientras que antes transmitían esa información cada una hora, lo que dejaba 60 minutos "ciegos" en la toma de decisiones.
Se trata de una evidente mejora en los estándares de seguridad para la población e instalaciones del borde costero de Chile.
En paralelo, el SHOA trabaja en un nuevo sistema predictor en conjunto con la Universidad Federico Santa María que iniciará su marcha blanca en los próximos meses. El Sistema Integrado de Predicción y Alerta de Tsunamis (SIPAT), como se llama el nuevo modelo, ha contado con la asesoría técnica de la agencia aeroespacial de Alemania y considera una completa base de datos de los terremotos seguidos por maremotos, todo con miras a acortar los tiempos de toma de decisiones e incrementar la información disponible para las mismas. Son esfuerzos destinados a dejar en el olvido el lamentable desempeño que tuvo ese organismo de la Armada la madrugada del 27-F y cuyas repercusiones judiciales están aún lejos de concluir.