Carlos Said y Macarena Toro

El compromiso del Gobierno es claro: avanzar en la gratuidad para el 70% de los jóvenes más vulnerables al 2018 y en seis años llegar a la gratuidad universal. El programa de Michelle Bachelet también especifica algo que ella misma ha planteado: "gratis y malo no le sirve a nadie". Por eso, la gratuidad solo se dará en instituciones acreditadas, sin lucro y que cumplan una serie de requisitos; entre otros, tener un porcentaje de alumnos vulnerables en sus aulas.

Ese fue el punto de partida con que el ministro de Educación, Nicolás Eyzaguirre, recibió la misión de llevar a un proyecto de ley la principal promesa del Gobierno. Una promesa que no es fácil y que implica, entre otras cosas, asegurar un adecuado proceso de transición.

Esto es parte de lo que consignan documentos de la División de Educación Superior del Mineduc a los que accedió "El Mercurio" y que han sido presentados a autoridades universitarias en los últimos meses. En ellos se establece que será voluntario para las instituciones adscribir al sistema. Para ello deben cumplir, junto con los requisitos ya señalados, otros, como "regirse por el sistema de transferencia de fondos que determine el Mineduc" -lo que implica una mayor regulación sobre los aranceles-, "no cobrar ninguna suma de dinero a los estudiantes" y "considerar participación de la comunidad en la gobernanza de la institución".

El texto afirma que, en régimen, los estudiantes matriculados en los planteles que firmen los convenios tendrán derecho a estudiar gratis su carrera de pregrado y que el Estado financiará directamente a la institución. A los alumnos se les permitiría -dice el texto- cambiar de carrera por una vez.

El crédito

Además del derecho a la gratuidad, los documentos del Gobierno hablan de un nuevo "crédito complementario al sistema", que estará disponible para estudiantes matriculados en las casas de estudio que hayan suscrito la gratuidad. Según explican quienes conocen la propuesta del Ejecutivo, este crédito iría a los alumnos que no son parte del 70% más vulnerable, el primero en acceder a la gratuidad. Como llegar a todos los estudiantes tomará más años, el Mineduc estudia abrir esta posibilidad para que los jóvenes de mayores ingresos puedan financiar su educación durante esta transición.

¿Cuáles son las características del crédito? Será "administrado por el Estado, con una tasa subvencionada, pago contingente al ingreso y recaudación a través de la Tesorería General de la República", plantea la presentación del Mineduc.

La fórmula se asemeja a lo que hoy es el Fondo Solidario, que está enfocado a las universidades del Consejo de Rectores. La duda que cabe dentro de quienes han conocido las propuestas del ministerio es qué pasará con los matriculados en planteles que no firmen la gratuidad. Según el documento, para ellos no habría crédito. De todas formas, en el ministerio han hecho hincapié en que todas estas ideas aún están en evaluación de cara al envío del proyecto de ley. "El Mercurio" consultó al Mineduc, pero desde la cartera declinaron referirse.